Su llegada hizo crecer la ilusión de los hinchas. Todos los simpatizantes se imaginaban a ese goleador que tuvo buenos momentos vistiendo la camiseta de Colón de Santa Fe en Primera División y que fue la gran figura de Atlético Rafaela en la enorme campaña que depositó a la Crema en la elite del fútbol argentino en 2011.

Pero sus primeros partidos con la casaca de Patronato no fueron los esperados; más allá de su entrega para pelear cada pelota con los defensores, se encuentra errático con el arco y ha desperdiciado situaciones claras para convertir.

En declaraciones a El Diario, César Carignano analizó la derrota del Rojinegro ante Gimnasia y Esgrima de La Plata, se refirió al momento del equipo y a su actualidad personal, y se tomó un tiempo para hablar del líder del campeonato y próximo adversario del elenco comandado por Luis Medero y Claudio Marini, Rosario Central.

“Fue un partido bastante parejo, tuvimos las situaciones para poder ganarlo y por esto que tiene el fútbol lo terminamos perdiendo de una manera muy dolorosa”, brindó su opinión el centrodelantero sobre la caída ante el Lobo.

Y añadió que “puede ser que nos haya costado generar fútbol, pero tuvimos más situaciones de gol e hicimos un partido en ofensiva mucho mejor del que tuvimos contra Gimnasia de Jujuy. Creo que el resultado final condiciona tremendamente el análisis”.

Ante la consulta si al Santo le faltó una cuota de suerte, el oriundo de Freyre evitó cualquier tipo de excusas: “Eso queda para un análisis y una charla interna, pero la gente no se le puede decir eso porque suena como un ‘chamuyo’ barato, y lo que menos hay que hacer en estos momentos es desligar culpas”.

Y anexó: “Hay momentos en el que el azar define cosas y contra Gimnasia no lo tuvimos a nuestro favor pero es un condimento más, no el único. El equipo con limitaciones, errores y virtudes tuvo una entrega máxima hasta el final y se repuso ante la adversidad. Sí creo que el tercer gol de ellos fue fulminante en lo anímico, porque cuando pensábamos que lo podíamos ganar lo terminamos perdiendo”.

En la temporada 2010/11 Carignano fue el máximo artillero del campeonato, anotando 21 goles para obtener el ascenso con Atlético de Rafaela en un conjunto que lo tenía siempre en el corazón del área rival, donde era abastecido constantemente por sus compañeros de aquel entonces.

Actualmente, a partir que la pelota no le llega con claridad, retrocede unos metros para tener contacto con el balón generando que se sitúe lejos del arco adversario, por lo que no cuenta con demasiadas situaciones para convertir. Al respecto expresó: “La semana pasada, contra Aldosivi, tuve chances claras y no las convertí por errores míos, el domingo no tuve suerte en la pelota que peiné y se fue cerca del palo. Los partidos se desarrollan de diferentes maneras y el equipo tiene distintas necesidades en cada momento”.

Y aclaró con relación a su sequía goleadora: “Lo que debo hacer es adaptarme a lo que el equipo necesite; hay momentos en los que puedo estar más cerca del arco y otros en los que no, pero lo que no se negocia es la entrega y en eso estoy tranquilo. Es lógico que las ganas de convertir existen y para cualquier delantero pasar mucho tiempo sin marcar genera desconfianza”.

Y cerró: “Está claro que cuando tenés pocas chances de gol, el margen de error se achica y la ansiedad crece un poco. Pero a eso hay que trabajarlo y mantenerse equilibrado mentalmente para responder adentro de la cancha”.