El Tribunal Oral Federal de Paraná juzgará a nueve represores por las desapariciones forzadas de Sixto Francisco Zalazar, Julio Alberto Solaga, Norma Beatriz González y 25 casos de privaciones ilegítimas de libertad y torturas. Los represores Ramón Díaz Bessone, Jorge Appiani, Oscar Obaid y Alberto Rivas; los ex policías provinciales José Appelhans, Luis Armocida y Carlos Zapata; el policía federal Cosme Marino Demonte; la agente penitenciaria Rosa Bidinost; y el médico Hugo Mario Moyano se encuentran acusados de integrar una asociación ilícita, en el marco de un plan sistemático de persecución y exterminio de militantes políticos.
En este sentido, José Zalazar sostuvo en diálogo con Diario Río Uruguay que “vivo con mucha tranquilidad el inicio de los juicios”, aunque agregó que “quienes viven esto de manera más fuerte y de manera más emocional serían mi madre y mis hermanas, que son las que vieron cuando llevaron a mi papá”. Por lo tanto, “intento mantener la calma para darles fuerzas a ellas”.
Semana de la Memoria en Concordia
En tanto, Zalazar narró como serán las jornadas en esa ciudad, y puntualizó que este año las actividades iniciarán el 19 de marzo con la proyección de una película llamada “Casa Tomada” en el cine Auditorium, que trata de una pareja de militantes ciegos de Santa Fe. El día de la proyección se contará con la presencia de la directora del film y de la familia de estos jóvenes.
El 20 de marzo se inaugurará un mural en la escuela Normal realizado por los propios alumnos, con la técnica de esténcil donde se recordará a los dos concordienses como fueron Sixto Zalazar y Julio Solaga. Ese día también se hará una muestra fotográfica en la peatonal del Bicentenario de juicios de otras partes del país donde ya han comenzado.
Tras ello, el 22 de marzo se proyectarán películas en el Profesorado de Ciencias Sociales y el viernes 23 se propone una vigilia en la plaza 25 de mayo “con radio abierta y aulas abiertas, para que participen los distintos profesorados y las escuelas” indicó.
Para el 24 se prevé una maratón por la memoria en el barrio Almirante Brown y después el acto central en la plaza Urquiza, pero con más participación de los jóvenes orando y con militantes de la época.