Lucas Márquez, estampó su firma en el nuevo contrato que lo vinculará con el Santo hasta junio del 2014. Luego de una negociación difícil (duró varios meses) y la intención del jugador de cambiar de aire, la oferta del club paranaense y la demanda del futbolista llegaron a un punto medio y las dos partes lograron el acuerdo.
Para la institución esta rubrica de Rafa significa asegurarse la continuidad de uno de sus principales patrimonios futbolísticos y para el jugador una mejora en lo económico, además de la continuidad laboral.
“Me siento conforme con el arreglo, sino, no hubiese firmado”, destacó el jugador. Y agregó en declaraciones a El Diario: “Además hay una cláusula que permite mi salida en junio en caso de que llegue una oferta”.
Dentro del vínculo entre el defensor y Patrón, se estipuló una condición que indica que el deportista puede cambiar de equipo a mediados del 2013 si aparece una suma de 400.000 dólares (estando el Santo en la B Nacional) o de 600.000 de la misma moneda si el conjunto entrerriano asciende a Primera División.
De esta forma se da por descartada la posibilidad de que el zurdo emigre a Instituto de Córdoba, como se especuló en algún momento. Luis Medero y Claudio Marini contarán con un elemento importante dentro de la competencia interna del plantel.
Márquez, que si bien no sumó los minutos que esperaba, estuvo presente en 10 partidos del Rojinegro durante el primer semestre.