(Por S.W. para ANÁLISIS DIGITAL)

Dos de los consultores más conocidos de la provincia, Carlos Elgart y Jorge Majluf, se prestaron a debatir públicamente en el programa Fuera de Juego (Canal 4 – Gualeguaychú). Vieron bien posicionados a la presidenta Cristina Fernández y al gobernador Sergio Urribarri, ambos en busca de la reelección. También coincidieron en que algo muy crucial debería acontecer para modificar las tendencias que aparecen favorables al oficialismo. La diferencia los enfrentó cuando llegó el momento de analizar el mapa político de la ciudad anfitriona. El local habló de corte de boleta y puso en duda la continuidad del intendente Juan José Bahillo. Muy por el contrario, el capitalino lo posicionó primero y con una ventaja de 10 puntos por sobre Emilio Martínez Garbino, candidato a presidente municipal por Color Gualeguaychú.

Elgart comenzó por contextualizar describiendo a Entre Ríos como una provincia “históricamente polarizada”. “Del 83 a la actualidad, el peronismo, de 28 años gobernó 20”, apuntó y agregó: “Únicamente en el ‘83 y en la última elección el peronismo sacó 34 por ciento y polenta. Después, el piso del peronismo anduvo siempre en el 45 por ciento y de ahí para arriba”. “Todo indicaría que estando bien los indicadores macroeconómicos del país, a nivel nacional el peronismo tendría muchas chances de repetir una buena elección, y ello repercutiría en lo provincial”, continuó.

“Ahora, cuál es la situación inusual que se da en lo provincial: es la primera vez que hay una escisión del peronismo dentro de su estructura. Lo cual plantea un desafío histórico para ese 45 por ciento que el peronismo venía sacando. Este sería el partido de Urribarri, que si logra mantenerlo, sería histórico respecto de una escisión del peronismo que está marcando otra figura importante como lo es Jorge Pedro Busti, tres veces gobernador y un hombre totalmente conocido”, completó Elgart.

Majluf compartió el planteo. “Los indicadores para el oficialismo a nivel provincial y nacional están en verde en cuanto a buen funcionamiento del actual gobernador, también de la Presidenta”, dijo y cuantificó: “En la provincia es habitual, al menos así lo indican nuestros muestreos, Urribarri saca una ventaja que ronda los 15 y 20 puntos con respecto a Busti, que generalmente nos da segundo. La única vez que me dio tercero fue en una medición en Gualeguaychú, en un muestreo que hicimos a mediados de junio pasado. En algunas localidades Urribarri también lidera, pero con menos ventaja, unos 10 puntos. En otras la diferencia es superior, por ejemplo en Chajarí nos dio ventaja de 40 puntos”.

“Esto está en consonancia con lo que sucede a nivel nacional”, continuó diciendo Majluf. “A Cristina es raro verla con una intención de voto que no supere los 40 puntos –excepto en Gualeguaychú donde está en los 36-. Lo usual es que esté entre 40 y 50, y en algunas localidades de la provincia está holgadamente superior a los 50 puntos de intención de voto. A eso agreguémosle una oposición totalmente atomizada, donde lo vemos a Ricardo Alfonsín (UCR) generalmente en segundo puesto, pero nunca superando los 15 puntos de intención de voto”, apuró.

Romper la tendencia de aquí a octubre

Ambos consultores coincidieron en la escasa probabilidad de que el escenario electoral cambie en los tres meses que restan de aquí al 23 de octubre, de modo de modificar las preferencias más marcadas y la tendencia favorable al oficialismo.

“Salvo que haya algún hecho que salga de lo normal, viene la etapa electoral, los errores de campaña son usados por el contrincante, el panorama va a cambiar poco”, reflexionó Elgart y señaló además cómo a nivel provincial bajó el grado de conflictividad del gobierno con distintos sectores. “Ha logrado solucionar los conflictos gremiales, que muchas veces mellan la imagen de un gobierno”, subrayó y si bien reconoció al conflicto docente como “uno de los más sensibles para la gente”, entendió usual el que se está perdigando en estos días. “A medida que se acerca el proceso electoral, tienden los conflictos a aumentar, los gremios a presionar; pero este escenario de cierta tranquilidad genera certidumbre y esto abona una imagen positiva de gobierno”, defendió.

Majluf compartió el análisis de Elgart y acotó que “la imagen negativa del gobernador es muy baja”. “No tengo registro de una imagen negativa superior al 10 por ciento. Anda siempre en el 4 – 8 por ciento. Faltan tres meses, pero tendrían que pasar cosas muy importantes para torcer las líneas de tendencia”, resaltó el paranaense.

En ese contexto, Elgart implantó igualmente la “cuota de 130 mil votos históricos en la provincia de Entre Ríos que se expresan por fuera de los partidos tradicionales y que en la última elección llegó a 196 mil votos”. “Habrá que ver también los 60 mil nuevos votantes que habrá en esta elección hacia dónde canalizan su voto”, acotó.

“Creo que la cifra es mayor, que hay un voto pragmático que va in crescendo y que va a seguir así”, consideró Majluf, pero a su vez volvió sobre la idea de la situación confiable y el deseo de continuidad.

La predestinación de Cristina / El ocaso de Duhalde

La distracción del electorado que aún no ha ingresado en clima, la atomización de la oposición y las elecciones primarias instauradas para este 14 de agosto, sumarían impulso a la carrera de Cristina Fernández por permanecer en la Casa Rosada.

“Lo que vamos a ver de acá en adelante es: primero, la elección de Santa Fe; si gana el candidato de Hermes Binner, va a servir para el posicionamiento mediático del candidato a presidente, que anda medio perdido a nivel nacional. Después viene la elección de Córdoba, es un final abierto, no se sabe si es Luis Juez (Frente Amplio Progresista) o Juan Manuel de la Sota (Unión por Córdoba), pero ninguno está ligado al gobierno nacional. Pero qué pasa. Todo este efecto que obviamente se va a dar en medios que están jugando fuerte, de romper la predestinación del hecho electoral de octubre que hoy el gobierno intenta mostrar; se va a volver a consolidar en agosto, porque qué se va a medir una Cristina ampliamente distanciada del resto de los candidatos. Lo cual va a volver a instalar la predestinación de Cristina”, desmenuzó Elgart, para quien la concurrencia a las primarias no va a ser alta, pero de todos modos van a oficiar de encuesta para la oposición.

“Lo que va a pasar es que quien salga segundo se va a posicionar como el contrincante de Cristina y va a apelar a la especie de voto útil. Ya algunos opositores como Eduardo Duhalde han salido a traslucir que hay que acompañar al que salga segundo, es decir, tratar de polarizar la elección y eso no es fácil de hacer. Supongamos que el segundo sea Ricardo Alfonsín, no va a conquistar un voto progresista de centro izquierda, porque es un candidato que se ve corrido hacia el centro derecha por sus alianzas pragmáticas; entonces tal vez ese voto se perfile hacia Binner, que ya va a estar un poco más instalado, porque ha hecho una alianza más coherente”, explicó el gualeguaychuense y remató descartando a Duhalde: “Tiene un discurso que no muestra confianza en sí mismo, no se siente seguro de salir segundo”.

Majluf apoyó la sentencia. “A nosotros Duhalde nos muestra un amesetamiento. La medición es muy baja tanto en imagen como en intención de voto. La distancia de Jorge Busti en Entre Ríos, sumado a algunos otros cambios, lo afectó. Hoy al no tener Busti un candidato arriba, tiene ese elemento en contra, pero tampoco le habría aportado positivamente mantener a Duhalde. Nuestros números no nos dan una intención de voto a Duhalde superior a los 12 puntos en cualquier localidad de la provincia. La intención de voto es así de baja, y la ecuación imagen positiva vs. imagen negativa, en casi todos lados también es adversa. Duhalde en general tiene más números en rojo que en verde, inclusive en Concordia”, fustigó el paranense.

De todos modos, el titular de Mercado reconoció que “estos son números puntos de partida”. “La gente hoy está más digiriendo la eliminación de Argentina frente a Uruguay en la Copa América que mirando a los candidatos que va a tener en agosto y octubre. Así que cuando la gente un poco vuelva la vista hacia la política, puede haber cambios. El tema es que todos los indicadores: la imagen positiva de la Presidenta que va en aumento; la imagen negativa que va en disminución; mismo fenómeno para el gobernador con números más favorables todavía; todo hace pensar que, salvo alguna cuestión fuerte, habrá un triunfo del oficialismo”, asentó.

Gualeguaychú, ¿por la continuidad o por el cambio?

El orden local fue el que despertó mayores disidencias entre los encuestólogos. Es que para Elgart, la posibilidad pasa por que el electorado siga al oficialismo en la provincia y la Nación, pero en Gualeguaychú se manifieste cortando boleta. Hipótesis que resulta poco firme para Majluf, que ve al intendente Bahillo -con intenciones de reelección- cómodamente posicionado con 10 puntos de ventaja.

“La historia electoral muestra que si bien el corte no es un ejercicio muy usual en el comportamiento entrerriano, no quiere decir que no se dé. La pedagogía del corte la apoya el político, es el que ejercita el corte. Y muchas veces ciertas figuras preponderantes, más que nada en lo local, donde se potencian más las figuras, en donde el ciudadano conoce más al político y hay una mayor identificación, el corte se produce ahí abajo”, fundamentó el titular de Consultar, para luego plasmar: “En lo local, el corte de boleta se ha dado en la historia. De hecho Bahillo ganó con un margen de 3 mil votos en su momento frente a (Luis) Leissa”. “En Gualeguaychú es posible el corte porque hay figuras fuertes de la política”, insistió.

Majluf, por su parte, vio las cosas “un poco diferentes”. “Creo que en la mayoría de las ciudades, en la provincia y en el país, hay un eje que puede ser diferente a lo que elecciones atrás se presentaba, que es: continuidad o cambio. Creo que esta vez el eje es continuidad. Sabemos que el voto es multimotivacional, hay un montón de factores que influyen para que una persona vote a uno u otro candidato. Pero el más fuerte, relacionado a lo económico, es el análisis consciente o inconsciente que hace el elector de si estamos bien o mal comparado con el pasado inmediato. En ese análisis que hace el elector, la respuesta en un porcentaje no menor al 60 y no mayor al 70, es que estamos bien. Siguiendo esa línea de pensamiento, da como resultado continuidad”, se explayó el paranaense.

Y precisó: “En Gualeguaychú, tanto en números como en esa idiosincrasia, nos da ventaja para el justicialismo en los tres niveles: en el municipal, Juan José Bahillo -que anda en el orden de 10 puntos sobre Emilio Martínez Garbino-; y a nivel provincial y nacional. Si bien Gualeguaychú es una de las ciudades menos favorable para el oficialismo, hace una sinergia entre los tres que pinta todavía mejor el panorama”.

Respecto de los demás candidatos, en tanto, el titular de la consultora Mercado indicó que la última medición desarrollada en la ciudad a mediados de junio pasado, el senador provincial Osvaldo Chesini, candidato a la Intendencia por el Frente Entrerriano Federal (FEF) se ubicó tercero, “con una intención de voto que no es baja para ser su lanzamiento”; y cuarto se posicionó el referente de Propuesta Republicana (PRO), Juan Castex, “que todavía no tiene un grado de conocimiento importante por lo que se pudo detectar”.