El ex ministro de Gobierno Fermín Garay aseguró que el ex director de Transporte de la anterior gestión Eduardo Ramón Cuadra “es un hombre muy expresivo y emotivo”, por lo cual fue procesado esta mañana por el juez de Instrucción número 1 de Paraná, Ricardo González, por los incidentes que se suscitaron el año pasado en la Cámara de Diputados cuando un grupo de dirigentes y trabajadores del Estado provocaron una violenta jornada en el interior del recinto. Asimismo, destacó que el ex gobernador de la provincia, Sergio Montiel (UCR) tiene buen ánimo, a pesar de haberse enterado que su testimonio en la causa por “defraudación contra el Estado provincial” fue postergado para agosto. En tanto, señaló que el gobernador de la provincia, Jorge Busti (PJ) “es un hombre muy hábil”, y negó tener contactos con la ex cúpula policial provincial actual.
Garay hizo referencia al procesamiento de Cuadra por instigación a la violencia, y manifestó que “su problema es que lo acusan por haber perturbado la Asamblea Legislativa”, al tiempo que lo calificó como “un hombre muy expresivo y emotivo”.
Al ser consultado por el estado de ánimo del ex gobernador Montiel, luego de enterarse de que su testimonio en la causa por “defraudación contra el Estado provincial”, por el convenio que durante su administración concretó la Dirección General de Rentas (DGR) con la empresa de colectivos San José, entregándole a la provincia unidades de transporte para sanear la deuda con el organismo -de casi 425.000 pesos-, se postergó para agosto, Garay contestó: “El ánimo de Montiel es muy bueno, es un hombre sorprendente por su fortaleza, y algunos quisiéramos igualarlo”, al tiempo que afirmó que “esta es una denuncia muy larga que abarcó a todos los ministros”.
En tal sentido, aclaró que si bien está denunciado en el marco de esta causa, “uno tiene la certeza que no ha cometido nada malo, por eso se que todo va a salir bien”, precisó.
En declaraciones realizadas a Radio Uno reconoció que “el gobierno de Busti, es el gobierno de un hombre hábil”.
En otro orden, Garay negó tener contactos con la cúpula policial provincial, aunque destacó que guarda el mejor recuerdo de la relación que mantuvo con la fuerza en su gestión. Al respecto, subrayó que “nosotros éramos más ordenados y no cometíamos tantas torpezas como las que se cometen, o se cometieron hace tiempo con el caso Abib por ejemplo”.
Por último, se refirió a la designación de Felipe Ascúa para presidir el CGE y manifestó: “No me cayó ni mal ni bien su designación, no me asusta, y creo que lo entenderíamos si fuésemos más civilizados los argentinos”.