De ANÁLISIS

(Desde Gualeguaychú)

Primero algunas cuestiones básicas que el lector debe tener respecto de la competencia del Carnaval del País 2022.

Este año hubo dos hechos por el cual será recordado en la historia: luego de un año de suspensión por la pandemia del Covid-19, se reanudó el mayor espectáculo a cielo abierto que se vive en el país en el Corsódromo “José Luis Gestro” de Gualeguaychú; y por primera vez desfilaron en esa pasarela de 500 metros las cinco comparsas que animan históricamente el mejor Carnaval del País: Ará Yeví (Tiro Federal), Papelitos (Club Juventud Unida), O´Bahía (Club Pescadores), Marí Marí (Club Central Entrerriano) y Kamarr (Centro Cultural Sirio Libanés).

Lo otro que es preciso aportar es que, por decisión de la Comisión del Carnaval, el año que viene tienen asegurado su lugar (no importan qué puntajes obtengan este año) las comparsas: Ará Yeví, Marí Marí y Kamarr.

Si la Comisión del Carnaval decide que en 2023 saldrán cuatro comparsas (en vez de tres como es tradición), la disputa real entonces es entre Papelitos y O´Bahía. Y esa es la verdadera competencia, porque las demás tienen asegurado su lugar para la próxima edición.

En ese contexto anoche prohibieron a la comparsa O' Bahía (Club Pescadores) tener su tradicional Comisión Agitadora del Frente, que está compuesta por ex integrantes o personas que no son parte de la comparsa propiamente dicha. Un policía fue el encargado de ir sacando de la pasarela a cada uno de los agitadores del frente y el club fue obediente y no hizo ningún escándalo.

Esta escuadra inicial de banderas (en algunas ocasiones con globos) era la encargada de alentar no sólo a los integrantes sino también despertar el entusiasmo en el público, como se hizo en casi todos los años.

La decisión de censurarla se adoptó tras una presentación que realizó Papelitos (Club Juventud Unida) y tras una votación en la Comisión del Carnaval, se decidió que a partir de ahora no aparezca en la pasarela del Corsódromo.

La competencia entre Papelitos y O´Bahía es clara y al parecer con algunas complicidades porque lo concreto es que no hay ningún reglamento o acuerdo previo que habilite a esta prohibición.

La otra cuestión en común es que esta cuarta noche fue la mejor para cada una de las comparsas, dado que han demostrado con creces que han mejorado en sus propuestas, corrigieron algunas falencias de coordinación, aunque otras se siguen percibiendo a pesar de los esfuerzos por disimularlas.

En cuanto a “presencias”, pasaron casi desapercibidos Miss Mundo Argentina, Amira Hidalgo, y Gonzalo “Patón” Basile, el boxeador de camioneros y que actúa en la serie El Marginal. De todos modos, seguramente serán amplificados por la cobertura que realizarán los medios que anoche estuvieron en el Corsódromo: TN, Canal 22, Infobae, Clarín, Canal 4 San Martín, entre otros que vinieron a registrar este aspecto de la industria del carnaval.

También anoche, de acuerdo a lo informado por la Comisión del Carnaval, presenciaron el espectáculo casi 19 mil personas: un muy buen número si se tiene en cuenta el calendario de fin de mes. Hay que tener en cuenta que la noche inaugural se informó 20 mil personas en el Corsódromo; 13 mil en la segunda noche y 14 mil en la tercera. Un total de 66 mil personas, nada despreciable si se tiene en cuenta que el año pasado se tuvo que suspender por la pandemia.

Como se ha señalado en otras crónicas, números más o números menos, este año se valora como pocas veces la presencialidad, en una actividad como la turística y cultural que derrama sus bondades en el resto de las actividades comerciales y de servicio de la ciudad.

Ahora sí, las particularidades que hacen de una pluralidad creativa una singularidad estética.

Marí Marí es “Cosa de mujeres”

La noche fue inaugurada con el paso de La Aplanadora Marí Marí del Club Central Entrerriano con su tema de reivindicación de género y de historia y cambio social: “Cosa de Mujeres”.

La “Roja y Negra” hizo su tradicional despliegue, con un público que de manera espontánea la sigue desde la tribuna a lo largo de toda la pasarela y sin fisuras.

Bajo la dirección de Sebastián Benedetti, “Cosa de Mujeres” es una propuesta que invita a recordar a aquellas personalidades que han marcado una época y por eso han hecho historia.

Así como el río avanza siguiendo sus propias huellas, los pueblos avanzan siguiendo su memoria. “Cosa de Mujeres” es una propuesta que permite aprender de aquellas personalidades que han sabido "rebelarse" y "revelarse" ante las injusticias de un sistema y han dado –con la pedagogía de sus testimonios- testimonio que la vida siempre es más poderosa que toda opresión.

La historia refleja –a manera de ejemplo- que ellas poseen una fuerza ancestral, que además de generar vida, pueden burlar al olvido e incluso vencer a aquellos que la han oprimido a lo largo de la historia.

La comparsa Marí Marí (que en el idioma Mapuche expresa un saludo muy similar a “unos buenos días”) anoche desfiló demostrando que ha crecido a lo largo de estas noches de enero.

La Rojo y Negro refleja muy bien los colores de su bandera: pasión y misterio y lo sintetiza en esta temática, donde se hacen presente personalidades como Mercedes Sosa, Frida Kahlo, Evita, Micaela García, la Madre Teresa de Calcuta, entre tantas otras como Maria Salomea Sklodowska-Curie que trascendió como Madame Curie y fue dos veces Premio Nobel de Medicina; la capitana afro del ejercito independentista María Remedios del Valle; la poeta y cantautora María Elena Walsh; la dirigente radical y segunda médica del país, Elvira Rawson; la activista tucumana trans asesinada el 11 de octubre de 2015 en un contexto de crimen de odio, Amancay Diana Sacayán. Ella fue una de las principales activistas del movimiento de derechos humanos y de la lucha por el reconocimiento y la inclusión social del colectivo transgénero en el país. De hecho, el 18 de junio de 2018 el Tribunal Oral Criminal N° 4 de la Ciudad de Buenos Aires condenó a su asesino en una sentencia en la que por primera vez la justicia argentina calificó el asesinato de una travesti como un crimen de odio a la identidad de género.

Así, todas han sabido cambiar la historia en los ámbitos de la ciencia, el arte, la política, la justicia, la cultura e incluso han enseñado que todo espíritu tiene su razón y toda razón su espíritu.

Esta propuesta se inicia con la escuadra África que refleja el horror de la mutilación, como una de las maneras para ejercer el sometimiento a la mujer que tienen algunas culturas. Del mismo modo se puede apreciar a una Juana de Arco, tanto en su rol religiosa como luchadora. La historia enseña que ella tuvo que travestirse para no ser abusada.

Y está el fuego destructor como el que encendía la Inquisición, como los que ardían con la quema de brujas en la Edad Media y la quema de aquellas que reivindicaban un mejor trato laboral como las obreras de la fábrica de Nueva York que en 1911 fueron quemadas con impunidad y a partir de entonces, el 8 de marzo se conmemora el Día Internacional de la Mujer.

En otro clima del desfile de esta comparsa, su reina Silvana “Bombón” Fernándes regleja que es un carnaval aparte. Ella genera una atracción especial, y su danza a lo largo de los 500 metros de la pasarela no deja rincón sin marcar su calidad coreográfica y al mismo tiempo transmitir que todo movimiento no es otra cosa que ritmo.

Y el ritmo también tiene su memoria, no es una mera medida matemática o un reflejo pitagórico de la vida. La danza, la música, el respirar, incluso el sexo, todos juegan con la repetición e innovación rítmica que inhala y exhala compás y cadencias, es decir, gozos y satisfacciones.

Este esfuerzo estético que deslumbra al saber académico y al saber popular en un diálogo de la sensibilidad; luego se pierde cuando la batucada y la carroza de los músicos se eclipsan mutuamente, eliminando las luces de unos y otros. Una pena, porque no es toque de samba ni batucada, sino apenas un confuso sonoro que nunca encuentra la armonía.

Kamarr y su “Sembrador de ilusiones”

La comparsa del Centro Sirio Libanés es Kamarr, que significa “Luna”. Un nombre que hace al misterio de ese Medio Oriente que siempre se presenta mágico y asombroso para los ojos de un extraño.

La comparsa es dirigida por Rodolfo Rodríguez, y sus detalles permiten percibir como extraído de un relato de “Las mil y una noche”, cómo un mercader es hechizado y comienza a sembrar –para dicha del pueblo- ilusiones.

De clara estética arábiga, la propuesta remite a una cultura que ha hecho de la travesía una búsqueda humanística. Por eso, cuando mejor observó el cielo y las estrellas, mejor recorrió la tierra.

El mercader es hechizado por una mujer y desde entonces se convierte en un sembrador de ilusiones, aún en tierras extrañas. Porque si algo se aprende en Medio Oriente es que el inmigrante es un viajero que ha perdido su paraíso natural y sale en búsqueda de su tierra prometida.

Como se ha destacado desde el inicio de la primer anoche, la batucada “Las Audaces”, que está integrada solo por mujeres, es una nota distintiva por su propuesta estética, por su inconfundible expresión carnavalera, donde la pasista Alejandra Neves encuentra el mejor acompañamiento para que el público se deleite con la belleza, la música y una danza que brilla con la mejor sonoridad coral de la percusión.

Ará Yeví “Negra y dorada para siempre”

En tercer lugar, desfiló Ará Yeví (Club Tiro Federal), que es la actual portadora de la copa 2020. La tetracampeona este año presentó el tema “Turba” que es dirigida por Leo Rosviar.

“Turba” no refiere a la sustancia orgánica que puede utilizarse para fortalecer a las plantas, sino que es más sociológico o político si se prefiere. “Turba” remite a la idea de un grupo de personas que generan desorden o confusión, tal vez caos.

Como se ha señalado en su momento, su canción insignia lo define mejor: “De la ribera llega la turba con su bandera: negra y dorada. Viene bailando descontrolada”.

Esta comparsa cuenta la historia permite comprender que es posible derrotar al miedo, como a las injusticias que imponen los poderosos. Si bien por momentos “La turba” no es escuchada como corresponde, mientras los privilegiados gozan de beneficios y prebendas; luego se aprende que cuando el de abajo zapatea, el de arriba –indefectiblemente- tiembla.

Por eso la propuesta concluye que el pueblo “Turba” permite cambiar el oprobio de la injusticia por la celebración de la alegría.

El nombre de “Ará Yeví” es una voz guaraní que significa “tiempo de diversión”. Y eso también se refleja en cómo se cuenta esta historia. “De la ribera llega la turba con su bandera: negra y dorada. Viene bailando descontrolada”, corea a capela una tribuna que de inmediato acepta el romance con la carroza de los músicos.

Para destacar algo que se aprecia en el principio: los ochos zancos ofrecen una coreografía, cuya composición permite comprender por qué el movimiento está tan asociado a ir de un lado a otro, pero también “movimiento” puede ser una tendencia, un pensamiento: una turba que cambia la historia, transformando las injusticias por un carnaval de alegría.

O´Bahía convoca a las musas

La cuarta comparsa en desfilar fue O´Bahía del Club Pescadores, con su propuesta “Colombina”.

Esta comparsa es dirigida por Adrián Butteri, quien propone a través de “Colombina” que se la perciba como la musa ideal, especialmente entre los desposeídos. Ella transforma la angustia en certezas, donde el carnaval iguala a quienes quieren vivir mejor.

Sus colores distintivos son el blanco y azul, que representa la pureza y la tranquilidad. Como se indicó al principio, por decisión de la Comisión esos colores no pudieron ser parte del espectáculo a través de la Comisión Agitadora del Frente.

Está claro que la única disputa este año es entre O´Bahía y Papelitos, porque las otras tres ya tienen asegurado su lugar para el Carnaval 2023.

Si bien sus carrozas son un poco oscuras en comparación con las demás, O´Bahía logra contar esta historia de musa reflejando con maestría que para crear siempre hay que recordar.

Papelitos para cerrar la noche

La comparsa Papelitos del Club Juventud Unida, que este 2022 celebra 45 años de vida, cerró la cuarta noche del Carnaval del País.

Hay que remontarse –para enaltecer- a 1977 cuando se le dio vida a la “Murguita Infantil”, que en ese entonces lucía sus trajes confeccionados con papel. Ese hecho fue el que dio horizonte y cielo para el nombre de esta comparsa de la entidad decana.

Este año propone un tema basado en la estética africana: “Pawé”.

La historia cuenta que en una comunidad una mujer será madre y ella lo comparte con sus pueblos vecinos y así -entre todos- hacen el ritual ancestral para dar la bienvenida a esta nueva vida.

Ellos creen que todo ser tiene una canción propia, es decir, su “Pawé”, que a su vez lo traducen como “tu papel”.

Bajo la dirección de Juane Villagra, la historia se hace más clara cuando los músicos cantan: “Ecos de leyenda, nos cuentan que esa música ancestral / si la luna es llena, espíritus sagrados llamarán / madre que te adentras cargando en tu vientre la ilusión / vibras con la selva, gestando en lo profundo una canción”, reza la letra y la música de Andrea Benedetti y Martín Fernández, que con la banda “Furia del Oeste”, despierta a todos en la tribuna.

La batucada “Los Pibes de Juventud” recuperaron a su director Esteban Martín Piaggio, que en la tercera noche estuvo ausente por ser positivo en Covid-19.

Esta vez –a diferencia de la vez anterior- las carrozas completaron el mensaje, especialmente al final cuando se comparte al nuevo ser que ha venido a la vida.