
Por Colectivo de Trabajadores por la Ventana (*)
Acerca de la situación en el IOSPER: desde el colectivo de trabajadores por la ventana, vale recordar la denominación por la ventana, dadas las puertas cerradas por las burocracias; vemos con profunda preocupación el letargo vacacional crónico de una dirigencia gremial que se ha desvinculado desde hace años de la tarea docente, permaneciendo ausente ante el reclamo urgente y la emergencia de miles a quienes por mandato, deberían representar. La problemática de la educación en Entre Ríos merece, ante la manifiesta inoperancia y el evidente desinterés por sostener y descalificar la educación pública por parte del gobierno provincial y algunos legisladores, merece, reiteramos, un alerta, una presencia consciente y activa para defender lo que explícitamente se pretende ejecutar: destruir el Estado, que implica desarticular, quitar eficiencia, desfinanciar la educación, la salud y los servicios públicos para de esta forma entregar y rifar los espacios a los caranchos piratas oportunistas que operan aguijoneando, coimeando y/o reprimiendo. Visto está que el sistema de educación pública, el sistema de salud pública en órbita nacional y provincial están en crisis.
Los sistemas solidarios se han ido constituyendo en herramientas y estrategias posibles e inteligentes por parte de los ciudadanos en general y los trabajadores en particular. Los hospitales nacionales, provinciales, el PAMI y el sistema de obras sociales han significado una construcción, un logro que pese a todas las dificultades y carencias han mantenido la asistencia siempre perfectible del caro servicio, en este caso, salud. Dejemos desde el vamos aclarado que la salud pública, hospitales, PAMI, lejos de ser un gasto para un Estado, es el retorno que el Estado le debe a su contribuyente expresado en tasas e impuestos, o sea, el hospital no es gratuito, lo pagamos todos los ciudadanos con nuestros aportes.
El sistema de obras sociales oficiales y privadas resultan otro mecanismo complementario de articulación y calificación del servicio en salud, para lo cual existe el diseño de aportes personales y patronales, 3% cada uno. Los lobistas, los caranchos, la complacencia de algunos funcionarios y o representantes sindicales nos llevan al desastre, a la debacle. Dada la consideración sintéticamente expresada, exigimos: A) urgente convocatoria por parte de AGMER, como así mismo de los sindicatos hermanos, para ofrecer informes y realizar análisis concienzudos de la situación de nuestra obra social.
B) exigir al gobierno de la provincia, transparente informe de lo actuado al respecto, y que demuestre en consecuencia su no vinculación a lobistas, empresarios, laboratorios y sectores colegiados, en y por el negocio en salud. Los entrerrianos queremos disponer también de resortes políticos administrativos para intervenir la gobernación y legislatura, tal como lo han hecho ellos con nuestro CGE y Obra Social, ante burdas evidencias expresadas en conflicto de intereses entre funcionarios públicos, funcionales a negocios, barrios, ambiente, servicios, recursos naturales. C) a los profesionales de la salud, cuerpos colegiados y trabajadores de la salud, dejarles bien en claro que, pese a algunos, su futuro está atado a la suerte de la comunidad toda, y en este caso, IOSPER, a los trabajadores en particular.
La empatía, la solidaridad, los acuerdos posibles y los proyectos conjuntos resultan herramientas necesarias e imprescindibles. En estos tiempos difíciles, tiempo de manipuleo cibernético y digital de la corriente de opinión y las tendencias en conducta masificada, en estos tiempos de desencuentros, agresiones y divisiones planificadas desde el poder real y formal, nos merecemos, nos proponemos desde el llano, desde la acción honesta y alejada del curro y el oportunismo, construir unidad, construir participación, construir compromiso, construir movilización. De esta forma apuntalaremos la necesaria democracia participativa, gestando poder popular con poder de decisión, única forma para contrarretar la agresión a los espacios comunes.
El IOSPER no se rifa ni se vende, se defiende. Desde el colectivo de trabajadores por la ventana y otras organizaciones populares, NO estamos dispuestos a amputarnos las piernas para someternos al tránsito que nos ofrecen los malintencionados. ¡Asambleas escolares ya !
(*) Agrupación sindical