Dos personas que se encontraban atendiendo la farmacia Alberdi fueron maniatadas pasadas las 20 del jueves. Los ladrones entraron al local de Avenida Ramírez al 5.100. Armados y tras atar a las víctimas con precintos, empezaron a revolver la vivienda.
Según pudo saber El once, la dueña de 84 años se encontraba con el nieto de 16. Un joven tocó la puerta y el adolescente abrió. Dos personas entraron y otro quedó de campana.
En esa situación, uno de los ladrones pasó del otro lado del mostrador. Allí maniataron a la propietaria. Una vez que quienes estaban en el local quedaron inmovilizados, pasaron al fondo donde se encuentra la casa y empezaron a revisar las dependencias.
Fue en ese momento en que apareció una vecina que notó movimientos extraños. Tocó la ventana y, aparentemente, pensaron que era la Policía por lo que huyeron.