Ante la probabilidad de que las autoridades sanitarias del gobierno español resuelvan la suspensión de las importaciones de frutas cítricas desde la Argentina, el gobernador Jorge Busti remitió una carta al Presidente de la Nación Néstor Kirchner; haciéndola extensiva también al canciller Rafael Bielsa; al Jefe de Gabinete Alberto Fernández y al titular de la SAGPyA Miguel Campos. En la misiva se destaca que en Entre Ríos la actividad comprende 47.000 hectáreas, 1.500 productores, 30.000 puestos de trabajo directos e indirectos y el 30 por ciento de la exportación del país y pide que se tramite la suspensión de normativas europeas.

Cabe señalar que la Comisión Fitosanitaria Permanente (CFP) de la Unión Europea, en su reunión del 22 y 23 de marzo, resolvió modificar la Directiva 2.000/29/CE de mayo de 2.000. Estas modificaciones, de aplicarse en forma estricta, dejará fuera de la UE a importantes volúmenes de frutas, reduciendo la exportación en un porcentaje significativo con respecto a la campaña 2.003.

Lo perjudicial de la modificación se sitúa en dos puntos:

1. En el Punto 16.2 de la Sección I, Parte C, del Anexo IV de la Directiva 2000/29/CE, en lo referente a Xantomonas campestris y en el Punto 16.4 de la Sección I, Parte C, Anexo IV de la mencionada Directiva, en lo referente a Guignardia citricarpa, la Unión Europea exigirá en breve-desde fines del presente mes de abril-, el cambio de terminología de “parcela de producción” por “lugar de producción”. Esto último puede interpretarse como quinta o finca, lo que, dada la extensión de nuestros cultivos, significa que partes de establecimientos productores con problemas sanitarios no significativos, pueden llevar a descalificar a vastas extensiones de excelente estándar sanitario. En este sentido se insiste que el término “parcela de producción” se continúe aplicando con igual criterio que hasta el presente.

2. En el Punto 16.4 de la Sección I, Parte A, Anexo IV de la mencionada Directiva, se suprime la alternativa d), con lo cual se incrementa la exigencia en cuanto a control de Guignardia citricarpa, sin causa técnica justificada, pero que da pie para descalificar extensiones importantes de producción.
Busti remarca que desde 1.970 se está exportando frutas cítricas frescas a la UE, y las dos plagas no se han encontrado en Europa, lo que habla de la seguridad fitosanitaria de nuestras exportaciones. Además, no resulta afectada la salud del consumidor.
Por otra parte, la CFP de la UE no consideró antes de proponer la reforma a la Directiva 2000/29/CE, que: 1) Los servicios sanitarios de Brasil, Uruguay y Argentina solicitaron una reunión técnica, a efectos de presentar nuevas evidencias que avalan las posiciones del MERCOSUR.

2) A pesar del pedido, España, impulsor de la modificación, no comunicó adecuadamente las intersecciones y no presentó los resultados de los análisis de laboratorio y contraprueba, como lo exige la normativa internacional.

3) La modificatoria no aporta mayores salvaguardas desde el punto de vista sanitario y se convierte en un serio obstáculo para los cítricos argentinos.

4) Argentina presentó en febrero una serie de medidas que incrementaron la seguridad fitosanitaria, de amplia aceptación entre los países comunitarios, que dan un nivel de seguridad mayor que otro país que en este momento está exportando frutas a Europa.

5) La inconsistencia y la extemporaneidad de la exigencia en cuanto a exigir lugares de producción libres de síntomas desde el inicio del ciclo vegetativo a partir de la entrada en vigencia en los próximos días, cuando el ciclo vegetativo en el hemisferio sur, comenzó hace seis meses.

6) La inconsistencia de exigir análisis de laboratorio con muestreo a campo para Xantomonas sp. en lugares donde se reconoce la presencia de la bacteria. En este caso deberían requerirse dichas tomas de muestra, luego del tratamiento post cosecha de la fruta.