En enero de este año, repitieron la llegada al público correntino integrando la grilla de artistas en la Fiesta Nacional del Chamamé y del Mercosur. Un mes después, se presentaron en la Fiesta del Auténtico Chamamé Tradicional en Mburucuyá. Tienen hasta ahora, tres álbumes grabados, “Puro Chamamé”, “Rincón de los Aromos” y “Destino de Vuelo”.

“Nuestro conjunto folklórico litoraleño argentino, con un género chamamecero bien marcado, ha echado sus raíces en la zona del Montiel, región del Norte entrerriano donde se vive y se siente la identidad del chamamé de nuestros mayores”, dice el vocero del grupo, Facundo Díaz, que dialogó con El Litoral de Corrientes.

-¿Influyó el entorno familiar para el desarrollo artístico o fue pura vocación innata?
-Seguro que sí, pero por el apoyo tan necesario para impulsarnos, alentarnos y sostenernos. El grupo se formó casi sin querer, pero creo que ha tenido trascendencia gracias a la aceptación de la gente y al apoyo de nuestras familias y amigos que incondicionalmente nos brindan su mano tendida y más. Y somos consientes de que ca-da uno de los que hacemos éste “Alma de Montiel” pone mucho de amor, esfuerzo y el alma día a día.

-¿Dónde residen y cómo es el contacto con la gente del lugar?
-Somos oriundos de distintos pueblos del Norte entrerriano, pertenecientes a la región montielera. Somos de distintos lugares, por ello decimos que somos del Montiel, para que ninguno de nosotros se enoje.

-¿Cómo es la relación con los demás artistas, dado que hay muchos grupos abocados a difundir la música de don Ernesto?
-Bueno, me animo a decir que es muy buena, por lo menos desde nuestra humilde óptica. Felizmente, somos varios los grupos y cantores populares que desarrollamos el estilo chamamecero en la línea de don Ernesto y ello demanda una dedicación especial y un gusto musical exquisito.

-¿Y con Juan y Ernestito?
-Con Juancito y Leo compartimos el mismo gusto y respeto la música y por el estilo, por cierto, hemos estado juntos en Paso de los Libres en el homenaje a don Ernesto Montiel. Nosotros estamos muy felices de compartir esto tan bonito con ellos que son familiares di-rectos del “Señor del acordeón”.

-¿Cómo ven la integración de la música gaúcha del Brasil y la del Para-guay con sus instrumentos típicos como el arpa?
-Ellos, los hermanos brasileros del Sur, los paraguayos y uruguayos, al igual que nosotros los litoraleños argentinos somos consecuencia de “la mixturación” genética del nativo guaraní sudamericano y el gringo europeo dando origen al mestizo criollo, al gaucho. En zo-nas particulares pareciera que se agudiza este acerbo nativo, en el caso del Montiel en Entre Ríos, en el caso del payubre Mercedes y Mbu-rucuyá en Corrientes, en Sao Gabriel Rio Grande do Sul Brasil, el caso de Guarambaré en Paraguay; por dar cita a algunos pagos conocidos que se han encargado de rescatar y de conservar su identidad, su tradición, su música y sobre todo han transmitido de generación en generación ese mensaje original que es nada más y nada menos que nuestro modo de ser regionalmente idéntico “Ñandé rekó”.

-¿Creen en la permanencia del chamamé tradicional sin la incorporación de electrónica o pueden ambos convivir en perfecta armonía?
-Creemos que debemos usar la tecnología al servicio del chamamé, o sea, que nuestros instrumentos tradicionales puedan tener amplificación, sin dejar de ser auténticos.
Por otro lado aseguramos que “lo auténtico siempre perdura”; continúa y continuará su curso sin prisa pero sin pausa en el alma del pueblo y se traspasará de abuelos a padres a hijos y así sucesivamente.

-Los jóvenes cada vez se vuelcan más al chamamé ¿a qué lo atribuyen?
-A Dios gracias. Creo que mucho tiene que ver la aceptación del trabajo minucioso de artistas contemporáneos de la talla de Mario Bofill en primer término, de la difusión mediática, de la integración artística de los ballet o grupos de danzas folklóricos tan comunes en los pueblos del interior y creo también que en los últimos años se le empezó a dar un lugar más nivelado al chamamé en los festivales, preponderantemente en la región NEA con la necesidad urgente de traspolar las fronteras de nuestro Nordeste e integrarse con el resto del país en los grandes festivales.

Cuando nos encontramos con artistas, grupos y cantores jóvenes, bailarines y bailarinas y juventud expectante y vibrando con nuestra música nativa sabemos que es posible un mundo mejor.

-¿Qué planes tienen de ahora en más?
Motivados y con una carga de responsabilidad importante, seguimos desandando éste camino precioso, queremos llegar a ser profesionales sin dejar de ser los mismos gurises de alma de monte y chamamé, oriundos de un pueblo chico del interior del país.