Los tres planteos clave para el gobierno de José Mujica fueron que el intercambio de datos no sea retroactivo (es decir que no puedan ir por hechos ocurridos antes de la firma del convenio); que se incluyan mecanismos para evitar la doble tributación; y que los funcionarios de las administraciones tributarias y financieras de la Argentina no crucen el Río de la Plata para llevar adelante fiscalizaciones. Fuentes oficiales explicaron que la AFIP aceptó incluir “métodos para evitar la doble tributación”, los cuales van “más allá” del crédito fiscal dispuesto en la legislación argentina.
Esta medida significa que se garantizará que un argentino que tiene un activo en Uruguay, por ejemplo un inmueble o un depósito bancario, no pague por esas ganancias el tributo en Uruguay y en la Argentina. Y las mismas fuentes señalaron que la semana próxima Uruguay empezará a negociar un tratado similar con Brasil. Este tipo de acuerdos se reavivaron luego de las declaraciones de noviembre pasado del presidente francés Nicolas Sarkozy, que puso a Uruguay en una lista de “paraísos fiscales”. Uruguay integraba una “lista gris” de la OCDE, pero el 15 de diciembre el organismo lo excluyó, debido a que firmó nuevos acuerdos de información tributaria, por lo que llegó a la cifra de 18 que exige la OCDE, informó La Calle.