Más allá del indeseable lugar que ocupa en la tabla de posiciones -18º sobre 22 participantes- en Patronato no se pierde la calma. Las buenas campañas de otras épocas le permiten mirar de lejos la lucha por la permanencia. En el cuerpo técnico y en el seno del plantel hay convencimiento de que se trabaja bien y que los buenos resultados: “Ya van a venir”; es una cuestión de tiempo, de esperar.
La pelea por los puestos de ascenso ha pasado a ser un sueño casi utópico. Con 39 unidades acumuladas el objetivo pasó a ser sumar lo que más se pueda en los nueve capítulos que le quedan a la temporada. Con la intención de acumular unidades y quebrar la serie de cuatro encuentros sin éxitos.
La ausencia de Lautaro Comas -problemas en el hombro- desencadenó la introducción de Damián Toledo como titular. La medida precautoria tiende a incrementar la capacidad de contención presumiéndose que la desesperación del dueño de casa -hoy en descenso directo- hará que vaya desde el minuto inicial sobre la valla de Sebastián Bértoli.
Además el haber llegado a la quinta amarilla hará que Walter Andrade tenga ausencia obligada. Ante una eventual falta de los zagueros titulares, Marcos Minetti se transformó en la primera alternativa de recambio. Este domingo tendrá la oportunidad de ratificar lo bueno que muestra en las prácticas y crecer en consideración de cara al ciclo por venir.
En la mitad de la cancha no estará Damián Pacco. La primera alternativa que Lippi barajó fue incluir como carrilero por derecha a Germán Rodríguez, pero Yimi se resintió de una lesión que lo venía aquejando y finalmente Gastón Rossi ocupará el sector.
En el ataque, César Carignano esperará contar con el acompañamiento de los volantes externos para no quedar como llanero solitario. El Cari vuelve después de purgar dos fechas de suspensión.
Por otra parte, en Talleres el fantasma del descenso está al acecho. La victoria contundente de 3 a 0 sobre Sarmiento de Junín por la Copa Argentina fue considerada como un envión anímico para imponerse en la lucha que interesa: la de la permanencia.
Jorge Ghiso dispuso que Ezequiel Barrionuevo sea el reemplazante de Marcelo Vega -lesionado- en la zona de gestación y que Sánchez Sotelo se encargue de sustituir al goleador Gonzalo Klusener -suspendido-. Bottino tiene una dolencia en el tendón de Aquiles, se lo esperará hasta último momento; si no Chávez ocupará su posición en la última línea.
La urgencia de Talleres y la necesidad de Patronato se encuentran en Córdoba en un cotejo que el Santo espera sea el punto de partida para una seguidilla de resultados positivos que se le viene negando.