Delpo dejó el Court Central por la Cancha 2, notablemente más chica, menos ruidosa y con unas 50 personas en el estadio. En la entrada en calor se lo notaba dolorido, física y emocionalmente. Después de cada movimiento, elongaba especialmente alguna parte de su cuerpo. Claro, había terminado de jugar un partido de cuatro horas y 26 minutos con el número uno del mundo hacía sólo una hora y media. Detrás, en la cancha central del All England Club, se escuchaban los gritos en el partido entre el local Andy Murray y el serbio Novak Djokovic.
Pero Del Potro debía concentrarse en su partido. Por eso, cuando su primera pelota fue una devolución a la red del saque de Bryan no le gustó y cuando luego entregó un punto, ya con el servicio en su poder, después de la devolución se fastidió. Con su compañera, en cambio, era puro aliento, la tenía motivada en un partido que en la previa ya era muy difícil y que se complicó aún más con el maratónico duelo entre el tandilense y Federer.
Un puñado de argentinos que se quedó para ver el partido del dobles, lo levantaba en cada punto que conseguía. Pero después de un arranque parejo, la dupla argentina, por errores propios, se fue quedando y lo aprovechó la experimentada dupla americana para quebrar el saque de Del Potro y ponerse 5-2 con el servicio. Cuando estaban a punto de quebrarles el saque de Dulko, el tandilense no dudó en tirarle al cuerpo a Raymond, número uno con 38 años, que no tuvo respuesta, y así zafar de esa primera chance. Bryan se tomó revancha enseguida: en la siguiente oportunidad, jugó al cuerpo de Delpo y el set quedó para los americanos por 6-2.
Aprovechando el desgaste físico de Del Potro, el experimentado Bryan jugaba con drops cortos, pegados a la red, porque eran seguros puntos para Estados Unidos. Para evitar eso, en el cuarto game, el número nueve del mundo fue a la red, y Dulko le cubrió las espaldas. Así llegaron a ponerse 40-0 (luego la tigrense cometió una doble falta) para después llevarse el game y ponerse 2 a 2. Era una buena estrategia con el físico lastimado del mejor jugador argentino de la actualidad.
Pero en el saque, Bryan -ya clasificado a la final del dobles masculino junto a su hermano Bob- castigó sin que ninguna estrategia pudiera ponerse en práctica; como también les pasó a los estadounidenses, con el saque de Delpo (40-15 y 3-3). Todo siguió así hasta el 12° game, con Dulko al saque, la pareja argentina llegó a estar 40-30 pero una pelota a la red de ella y una protesta por un primer saque perdido que dio la jueza Fiona Edwards, de Gran Bretaña, terminó por consolidar el quiebre de Raymond/Bryan y la derrota de los argentinos en una hora de juego, da cuenta Clarín.