de ANALISIS DIGITAL
Pareciera que llegó a su final. Está todo dado y el cierre tendrá adeptos y detractores. De un lado estarán aquellos que esperaban que el idilio se extendiera al menos seis meses más, del otro los que esperan ver sus goles por primera vez, sobre todo un entrenador que lo pidió desde un primer momento y parece que su deseo se está por consumar.
“No pasa de hoy o mañana”, dijo el sábado un dirigente de la entidad paranaense ese “mañana”, es hoy, lunes, por lo tanto la decisión tendrá que tomarse a la brevedad y la comisión directiva, repartida en la votación, deberá desprenderse del último gran goleador de Patronato.
Es que muchos quieren que la Joya termine el contrato en junio y se quede los seis meses para luchar con el resto del plantel en la segunda parte de la B Nacional. Mientras que otros tantos esperan la venta del delantero para salir al mercado en busca de un jugador de las mismas características, aunque será complicado conseguirlo.
En este sentido es sabido que en el pago por el pase de Jara, Unión propuso que Matías Quiroga llegue a préstamos por seis meses y sin erogación alguna. El Flaco no tuvo muchos minutos en cancha tras el ascenso del Tate, es por eso que los dirigentes desean que comience a tener rodaje.
En este aspecto también hay dimes y diretes. El representante del delantero, Alberto Meo, dice que el jugador no tiene problemas en bajar de categoría. En tanto que Quiroga se enojó por ser “una moneda de cambio” y destacó que se deseo es seguir en el Rojiblanco.
El puntano fue uno de los primeros nombres que sonó para reforzar el ataque Santo. Con el correr de los días, y al conocer su cotización, enseguida se buscó otro plan. Igualmente, cuando Unión fue a la carga por Jara, la chance se reflotó y en Paraná quieren que el Flaco llegue por la Joya. ¿Se dará?