Contó que trabajan en forma coordinada con la sede local de Prefectura. “Nos dio, como probabilidad, que el nivel del agua llegará a los 3,97 metros entre los días 12 y 14 de septiembre, por lo que tenemos mucho margen para trabajar”, consideró.
“El río está en una altura espectacular, por lo que si sigue así lo podremos disfrutar plenamente”, subrayó la funcionario y en ese sentido infirió que tampoco hay pronósticos de lluvias abundantes para los próximos meses: “Lo que se está produciendo ahora son residuos de precipitaciones que vienen desde el norte”.
Consultada acerca de las tareas que emprenderán para poner en condiciones las playas, Ferreira destacó la labor encarada el año pasado, “por lo que sólo serán necesarios algunos retoques sobre la arena”.
Recordó que el verano pasado se llevó a cabo el refulado de arena, principalmente en el balneario Thompson, por lo que “no habrá necesidad de volver a tirar”.
“Nos favoreció que haya subido del río, porque cuando bajó el agua tuvimos tiempo para limpiar la zona”, indicó.
En los próximos días colocarán el boyado correspondiente y habrá presencia de guardavidas en cada uno de los turnos. “Tenemos arena en todo lo que proyectamos como boyado, y estamos tranquilos de que la gente se va a encontrar con esto y no con barro”, apuntó.
En tanto, por estos días, están rastrillando los espacios para remover la arena. Para el final, horas antes de la habilitación oficial, instalarán las duchas. En el caso del Thompson, habrá entre seis y ocho, más las que colocarán los concesionarios de los paradores.
La idea es trabajar sobre el terreno y acondicionar los lugares. Sobre estos aspectos, Amalia Ferreira indicó a El Diario que la idea es superar los 400 metros de playa que hubo el año pasado y extenderla 100 metros más.
“Queremos tener 500 metros y hasta un poco más, todo dependerá de cómo se desenvuelva el río, pero las perspectivas son buenas”, ratificó en declaraciones a El Once.
Por otro lado, indicó que en el balneario Parque deberá realizar otro tipo de labor, ya que las características del terreno exigen otros trabajos. Puntualmente, van a arrojar más arena en los espacios arbolados.