El primer tiempo mostró al Rojo enchufado, buscando contagiar a su gente que lo recibía otra vez en el Pacagnella. Metió en toda la cancha, dobló las marcas, no perdió la concentración. Las apariciones de Matías Novello, Emilio Domínguez y García Barros, manejado por momentos por Agustín Richard fueron difíciles de resolver para el Canalla rosarino, que, sorprendido, padeció el primer tiempo, viendo cómo se lo llevaban por delante, a punto tal de terminar el primer tiempo con una diferencia de 18, 48 a 30, luego de un parcial inicial de 27 a 17.
El tercer cuarto fue para la visita que terminó ganándolo 26 a 19 gracias a cinco triples clavados ante la mirada de un equipo local dormido. El tiro de tres que acertó Sierra en el cierre del cuarto levantó al Rojo para ingresar de mejor manera a los últimos 10 minutos.
El cuarto fue un tanto sufrido porque Rosario Central apretó más, propuso un juego duro en toda la cancha que le sirvió para arrimarse en el tablero. Se acercó a seis, con un 78 a 72 que llevó al DT Martín Andem a pedir minuto para calmar los nervios de sus jugadores, que veían en riesgo una victoria que parecía sellada minutos atrás.
Por eso llegaron al final, a esos 11 segundos con el Rojo arriba 82 a 80 y con tenencia de la pelota. Corte de la visita para que el local estire a tres la diferencia final, en un partido sufrido y peleado, da cuenta Uno.
Foto: La Calle.