El gabinete en pleno y la presidenta del Congreso de Intendentes rodearon al presidente uruguayo Lacalle Pou cuando anunció las medidas por el coronavirus.
No fue un día más en el calendario del nuevo gobierno uruguayo. El viernes 13 de marzo el flamante presidente de la República Oriental del Uruguay, Luis Lacalle Pou declaró la “emergencia sanitaria” preventiva por la confirmación de cuatro casos de coronavirus en ese país. Pidió la colaboración de la población, solidaridad, prudencia, y buscó enviar un mensaje de tranquilidad a la ciudadanía.
El nuevo jefe de Estado no escondió que Uruguay vive una situación compleja, producto de una realidad mundial por la expansión del coronavirus. Exhortó a no viajar al exterior -salvo que sea absolutamente indispensable- y apeló a la “madurez y sabiduría” de los uruguayos. El líder del gobierno pidió calma y prudencia y confió en que las medidas y esfuerzos que se están implementando le van a permitir a Uruguay superar la crisis sanitaria mundial, publicó el diario uruguayo El País.
“Estamos seguros de que vamos a poder mitigar los efectos negativos que está teniendo (el coronavirus) en otros países del mundo”, dijo.
Es la tercera ocasión en la que Lacalle Pou sale a escena en la sala de conferencias de la Torre Ejecutiva. La primera fue el 2 de marzo por seguridad, la segunda fue el miércoles 11 para anunciar el aumento de tarifas y la contención del gasto y la tercera fue ayer.
Lo hizo escoltado por todos sus ministros, y la presidenta del Congreso de Intendentes, Adriana Peña, que se ubicaron de pie detrás de la mesa donde se hizo el anuncio oficial.
Daniel Salinas, el ministro de Salud Pública fue el primero en sentarse ante el escritorio. El presidente demoró unos minutos en llegar ultimando detalles con sus asesores de comunicación y el secretario de la Presidencia, Álvaro Delgado.
Salinas esperó tres minutos 47 segundos en silencio con la sala de prensa llena de periodistas. En el fondo algunos jerarcas comentaban -un poco en tono distendido y un poco en serio- que no era apropiada la distancia entre ellos. Algunos incluso evitaron saludarse y lo hicieron chocando sus codos para evitar el contacto.
Lacalle Pou entró rápido se sentó y arrancó el anuncio. Además de la emergencia informó sobre el cierre de fronteras parcial, consignó el diario El País.
“Proceder al cierre parcial de fronteras implicando esto una cuarentena obligatoria para aquellos pasajeros declarados de riesgo o sintomáticos”, dijo. Más adelante Salinas detalló que los países comprendidos son: China, Corea del Sur, Japón, Singapur, Irán, Italia, Francia y Alemania.
Pero también solicitó colaboración y anunció la suspensión de todos los espectáculos público. “Lo mejor en estos tiempos, inclusive quien habla, es abstenerse de reuniones multitudinarias”, aseguró Lacalle Pou.
A nivel educativo, el ministro Pablo da Silveira comunicó que no se pasará lista de asistencia en todos los centros. Las universidades decidieron suspender las actividades por una semana, excepto Claeh.
Estas medidas preventivas están pensadas -al menos en un primer momento- hasta Semana Santa, que termina el 12 de abril.