Fátima Acevedo.
El bloque de concejales del radicalismo criticó “la inacción del municipio, de quien depende la Casa de la Mujer”, donde se hallaba alojada Florencia Acevedo y culpó al intendente de “intentar desligarse de la responsabilidad”.
Los ediles de la oposición sostuvieron que “el municipio debió actuar no solo en función de lo que imponen las normas del protocolo sino también en razón de la gravedad de las circunstancias: una joven sin botón antipánico, que se albergaba en ese lugar para refugiarse ante una denuncia de violencia de género que había realizado recientemente ante la autoridad policial. Muy por el contrario lejos de darle protección y contención se dejó a la mujer librada a su suerte y no solo eso sino que además al no regresar a dormir como lo hacía habitualmente, no realizó inmediatamente la denuncia para su localización y resguardo en caso de haber necesidad”.
Por su parte la sicóloga Graciela Mántaras, exsubsecretaria de la Mujer aseguró que “el intendente de Paraná desconoce que es una obligación del Estado municipal, a través de la Casa para mujeres víctimas de violencia, velar por su integridad y seguridad”.
“Decir que no hay un control sobre sus vidas y que sólo es un lugar de destino, de albergue, es desconocer los fundamentos esenciales de la Casa de las mujeres víctimas de violencia y su reglamento de funcionamiento interno”, afirmó.
“Por otra parte, la ley nacional N°26.485, ley de protección integral a las mujeres, establece la obligación de todos los poderes del Estado tanto en el orden nacional como provincial y municipal, de garantizar la protección a las mujeres víctimas de violencia”, apuntó.
“Y está más que claro cuando hablamos de mujeres víctimas de violencia, hablamos de aquellas cuyas vidas están en peligro”, enfatizó la exfuncionaria.