Alberto Fernández canceló su agenda y viajó hacia Jujuy para visitar a Milagro Sala tras enterarse de su internación en una clínica de la capital de la provincia. La líder de la Tupac Amaru se encuentra actualmente en terapia intermedia como consecuencia de una trombosis venosa profunda.

“Voy a visitar a Milagro, injustamente detenida, enferma, para acompañarla como lo hice siempre”, expresó el mandatario en sus historias de Instagram y agregó que también se acercó “para que se muestre esta situación oprobiosa que la Corte sigue sin resolver”.

“Te queremos mucho Milagro. Somos muchos los que te queremos y deseamos verte bien”, afirmó Fernández en una historia donde se lo puede ver junto a Sala en la habitación del centro médico Los Lapachos, publicó Perfil.

Posteriormente, el mandatario habló con la prensa desde la clínica y expresó su preocupación, no sólo por el estado de salud de la social sino también por su situación judicial.

“Mi preocupación por la situación de Milagro Sala no es nueva y la he planteado una y mil veces desde que empezó este ciclo  de lo que yo llamó ‘persecución a Milagro Sala’”, señaló el presidente y afirmó que se trata de “una práctica de persecución y de invento de causas”.

"Lo que le pasa no es un engaño, tiene una trombosis venosa profunda en el miembro inferior izquierdo, eso no es un tema menor, es un tema serio", mencionó al respecto de la salud de Sala y señaló que "lo que le está pasando es el resultado de las decisiones de la Justicia de Jujuy".

Fernández aseguró que se trata de “una clara persecución” y que, por más de que se encuentre en prisión domiciliaria, esto “es una gran penuria, sobre todo si las causas siguen apareciendo, se siguen inventando y los hechos de persecución siguen ocurriendo”.

"Prolongar detenciones preventivas es una forma de violar derechos humanos", aseguró después y remarcó: "Estamos en un estado de derecho y la justicia debe funcionar de otro modo a como yo creo que funciona en Jujuy".

Asimismo, el mandatario le pidió a los jueces jujeños que "dejen de lado teorías y doctrinas que se difundieron en el gobierno anterior y que contradicen la esencia del Estado de Derecho" y a la Corte Suprema que "por favor se aboque al tema".

"No estoy pidiendo inocencias, estoy pidiendo juzgamientos respetando las leyes argentinas y que los juicios se hagan sin presiones políticas, sin intencionalidades persecutorias y primen las reglas del debido proceso", concluyó.