Por CTPLV (*)

El observatorio salarial del Colectivo de Trabajadores Por la Ventana con la adhesión de la Agrupación Unidad Docente –ambas entidades pertenecientes a la Multicolor- presenta una investigación, análisis y valoración monetaria del consumo popular.

La caída del poder adquisitivo de los trabajadores activos y jubilados es degradante y dolorosa y, consecuentemente, la caída en el consumo es mucho más profunda de lo que muestran las estadísticas oficiales. Este mecanismo distorsivo de la inflación, a pedido de los organismos multilaterales de crédito, se le agrega la treta de no incluir en el cálculo de la inflación los descomunales aumentos en energía, combustible, servicios públicos.

La pérdida de los últimos años es escandalosa por tal motivo presentamos una propuesta de mínima que nos saque de la trampa empobrecedora de las paritarias, siempre a la baja. Esperamos la adhesión a la propuesta de Salario familiar mínimo vital y móvil de agrupaciones y sindicatos.

Para garantizar un salario inicial acorde a la carestía de la vida de una familia tipo, sin alquiler mediante, elaboramos una canasta básica de sobrevivencia, no óptima, que se acerque a los valores actuales y reales de bienes y servicios, y salirse de la trampa metodológica del INDEC, y que permita una vida “socialmente aceptable”.

Este método adoptado refiere a los hogares cuyo “jefe/a de hogar” es asalariado/a formal con título docente y otros habilitantes enmarcados en el precepto constitucional de igual trabajo igual remuneración. El ejercicio de la docencia está pautado en el estatuto del docente entrerriano, con carga horaria frente a alumno. Además, es hora de que sea reconocida la tarea no frente a alumno, en promedio equivalente al horario formal, que involucra la planificación y la evaluación extramuros.

La actualización del valor monetario de esa canasta se realiza mediante la variación de los componentes del IPC nacional calculados por el INDEC.

Este indicador aproximado intenta honrar con datos reales y fehacientes el artículo constitucional 14 bis del salario mínimo vital y móvil; el artículo 82, inc. d de la Constitución provincial (“El salario se fijará conforme al costo de la vida no será inferior al vital y móvil, y estará sujeto a aportes y contribuciones”); el artículo 7, inc. b del estatuto del docente entrerriano (“Son derechos de los docentes el goce de una remuneración justa, actualizada periódicamente de acuerdo a las oscilaciones del costo de la vida”).

Considerandos:

La inflación oficial está subestimada. El gobierno se niega a reestimar y actualizar el nivel general del índice de precios porque eso daría una mayor inflación. En efecto, el INDEC utiliza como insumo para estimar la ponderación del consumo de la población una encuesta de gastos realizada en 2004-2005 y que fue actualizada en diciembre de 2015. Esos datos no sólo son “viejos”, pues pasaron 10 años de su actualización y 20 años de la elaboración de la encuesta, sino que además no refleja los aumentos de los precios de, por ejemplo, los servicios públicos y el transporte.

En esta columna mostramos que la inflación es más elevada de lo que dice el INDEC y que su impacto en los salarios y el consumo es mucho más elevado de lo que presume Milei o los gobernadores como en nuestro caso Frigerio. En este sentido, una medición más realista de la inflación presenta grandes diferencias no sólo mes a mes, sino también en el acumulado interanual. Los efectos de este proceso son varios. La caída del salario de los trabajadores es aún mayor de lo que indica el INDEC y su recuperación resulta mucho más lenta. A su vez, la inflación real impacta en las actualizaciones de los jubilados y pensionados.

Finalmente, la caída en el consumo es mucho más profunda de lo que muestran las estadísticas oficiales y su evolución no llega a los niveles de noviembre de 2023. Todo un síntoma de que Milei utiliza las estadísticas a su modo para mostrarnos una realidad con mejoras inexistentes.

(*) Agrupación de docentes nucleados en la Multicolor