
Osvaldo "Coni" Cherep
La novena sesión de la Convención Constituyente, selló para siempre el debate sobre la perdurabilidad de los cargos de los miembros de la Corte Suprema en Santa Fe. Ya no habrá fallos para interpretar, ni artículos constitucionales para conjugar con otros que mejoren las chances de quedarse. El 12 de septiembre, cuando se sancione la nueva carta magna, los tres integrantes de la Suprema con más de 75 años y que se resistieron a irse, se tendrán que ir.
Adiós muchachos, compañeros de mi vida
Barra querida de aquellos tiempos
Me toca a mí hoy emprender la retirada
Debo alejarme de mi buena muchachada
Carlos Gardel
La Corte Suprema de Santa Fe tendrá siete miembros que terminan su mandato a los 75 años como límite. Y quienes tienen hoy 75 años o más, tendrán que renunciar a sus cargos. Lo dice claramente el articulado que regulará a la Justicia santafesina.
A pesar de todos los esfuerzos realizados por Rafael Gutierrez, Roberto Falistocco y Eduardo Guillermo Spuler, durante los últimos dos años. Los tres deberán abandonar sus cargos «ipso facto», en un par de semanas. Juntar sus cosas, y pasar a sus cuarteles de invierno jubilatorio. Sin ninguna dilación.
La única chance que les queda es embarrar más la cancha, negarse a jurar la nueva carta bajo la excusa de que llegaron por las reglas de la anterior, y eventualmente pasar el asunto a manos judiciales nacionales. Los que los rodean dicen que no lo harán. Y que los tres, a pesar de sus intenciones, van jurar por la Constitución y se irán.
Si se quiere, se trata del final de una era «político-judicial», que se mantuvo incólume desde la gestión de Carlos Reutemann. De hecho Spuler era abogado personal del ex corredor de F1 antes de asumir su cargo, y Gutierrez, un hombre de su estrecha confianza. Falistocco, en cambio, es aún más antiguo en el cargo y su designación fue firmada por Victor Felix Reviglio.
Las salidas de Mario Negri y Maria Angélica Gastaldi, dejaron en evidencia a los tres jueces , que cómo en los tiempos de la sanción de la ley de creación del MPA, se mantuvieron en sus lugares al ritmo del resistiré
Es el final de una historia que los tuvo como protagonistas centrales a Gutierrez y a Falistocco, que se alternaron casi todas las presidencias de la Corte en los últimos 20 años. Y controlaron de manera (bastante) discrecional todo lo que ocurría en los ámbitos judiciales y especialmente, la multimillonaria caja anual del Poder Judicial, sin rendir cuentas.
Se cae un régimen judicial en Santa Fe. Que no se caracterizó por el escándalo, es cierto, pero que supo mantener en vigencia un esquema de impunidad para todas las administraciones del peronismo. Alcanza con preguntarse por los resultados de aquellas causas que comprometían a los ex funcionarios del peronismo y la respuesta cae como un fruto maduro: ¿Cuáles fueron las condenas contra los vaciadores del Banco Provincial, para los que ordenaron los crímenes de diciembre de 2001 en Santa Fe, o para quienes fueron responsables de la inundación del 2003? Las tres causas, aunque emblemáticas, encabezan una larga lista de impunidades que los cortesanos supieron consolidar.
Pero se acaba. Ahora de manera inevitable y consumada. El 12 de septiembre será, técnicamente, la death line de sus mandatos. Un final indigno, para quienes debieron irse antes.
Fuente: conicherep.com