"Son dos nuevos instrumentos financieros. Uno es el bono argentino de ahorro para el desarrollo económico y otro es un certificado de inversiones para obras del sector inmobiliario y de la construcción, en el marco de la reforma de la Carta Orgánica del Banco Central", contó Lorenzino.
"Apuntamos a los que tenga ahorros en dólares sin declarar los utilicen para invertir", aclaró el ministro y completó: "Dinero que tienen debajo del colchón, en una caja de seguridad, o peor, en un paraíso fiscal".
"La idea es incorporar recursos ociosos en el modelo productivo", remarcó y aseguró que esta "medida se integran dentro de los esfuerzos que los países más avanzados están haciendo para atraer fondos de paraísos fiscales al mercado formal", publicó Ámbito.
A su turno, el viceministro de Economía, Axel Kicillof hizo un resumen de la historia de devaluaciones e inflaciones de los últimos 70 años. "Uno de los problemas recurrentes de la industrialización fue la aparición de periódicas devaluaciones del peso. La moneda argentina fue perdiendo solidez en el tiempo", explicó, en rechazo a los análisis económicos de la última semana, en los que evaluaban una posible devaluación como salida a la crisis económica.
Frente a ello, el funcionario se dedicó a refutar a los economistas "protagonistas de las peores catástrofes económicas de la Argentina" que "cuestionaron el proceso político llevado adelante". Y fustigó: "Que no les mientan a los argentinos, por supuesto que hay sectores que ganan con la devaluación, pero también hay sectores que se empobrecen".
El anuncio fue realizado en la sede de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) junto al titular de ese organismo, Ricardo Echegaray; el secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno; y la presidenta del Banco Central, Mercedes Marcó del Pont.