La polémica por el horario de funcionamiento de bares y pubs, sobre todo aquellos que se encuentran ubicados sobre calle Corrientes, parece agudizarse a medida que recrudecen las quejas de los propietarios de los locales de diversión nocturna.
Si bien solamente se fijó un tope horario que rige desde principios de 2009, el que también incluye a los boliches, entre los representantes del sector consideran propicio adecuar medidas que igualen su modalidad de funcionamiento con la de los bolcihes.
Ante la consulta de Uno sobre la posibilidad de concretar un encuentro con autoridades del Municipio el empresario sostuvo: “Solamente hemos hablado con -Alejandro- Cánepa (secretario Legal y Técnico de la Municipalidad de Paraná). Aunque solamente nos dijo que tengamos paciencia, que en los próximos nos convocarán a una audiencia”.
Acerca de los inconvenientes ocasionados por este conflicto enumeró que “en mi caso tengo a cargo cinco personas, donde se incluye la seguridad, los dj's, quienes van rotando frente a los problemas que me ocasiona el hecho de cerrar en ese horario. Tuvimos que reducir los días de trabajo”.
Asimismo explicó que “se efectuán controles periódicos, tanto en lo referido al horario de cierre como la constatación del sonido emitido por la música”.