“Concluyendo un mandato mas como intendente, quizás el mejor de mi carrera política, ya que me encontré con una ciudad devastada por la desidia y la corrupción, y entre todos transformamos a Santa Elena, para que sea el pueblo que más creció en materia turística, infraestructura vial y culturalmente, siendo la envidia de dirigentes de ciudades vecinas, que no han podido ni siquiera esconder los bochornos de una vida, vida de excesos y poco claro manejo de obras”, comenzó en su escrito el dirigente santaelense, para lanzar: “Nos encontramos con un palco lleno de odio y rencor”.
“Tuve que reponerme de una condena que siento injusta, y sigo peleando en estrados internacionales, fui víctima de quienes hoy son cómplices de vaciar la provincia, el tribunal de cuentas ha tomado hasta muestras de ADN en los decretos, y somos una gestión transparente y responsable”, afirmó.
Y calificó: “El viernes por la noche los santaelenenses nos encontramos con un palco lleno de odio y rencores”. En esa línea, el exvicegobernador denunció: “Nos quieren instalar una candidatura trucha (constitucionalmente vedada por carecer de requisitos para el cargo) de quien realizó malversación de los fondos de aportes de los afiliados al IOSPER, y destrozo la obra social de los entrerrianos, con la mansa (o quizás cómplice) mirada del Tribunal de Cuentas, el Procurador General de la provincia y parte del gobierno provincial”.
Y prosiguió: “Este personaje que hemos denunciado por enriquecimiento ilícito y malversación de fondos públicos, de aportes de gente que muchas veces no tiene una asistencia médica por no funcionar la mutual de los entrerrianos que hay personas con situaciones difíciles y no reciben respuesta y solución”.
“Bueno de (Pedro) Báez qué decir, `el ministro de propaganda´, nada me sorprende, de ser un vendedor de ollas y lenguaraz de `periodistas de investigación´ pasó a ser comisario de prensa para acabar con los periodistas `díscolos´. Así firmó bochornosos decretos millonarios que si algún día cambia la justicia tendrá que dar cuentas, y de cómo pasó de un Fonavi a un palacio con ascensores y un auto importado de siete cifras; yo vivo en el mismo lugar, austeramente, y siento el cariño de un pueblo que me acompañó con el 64 por ciento de los sufragios”, soltó.
Y continuó: “De (Gustavo) Bordet no puedo sentir más que pena, no sé si por sus problemas de salud, incapacidad u obsecuencia destruyó la Liga de Intendentes, el refugio de las ciudades para hablar de política y pelear por nuestros pueblos, así nos retrasan los fondos de coparticipación y garantías constitucionales”.
“Nos marginan, nos humillan y alegremente festejan, junto con (Juan José) Bahilo que hace ricos helados pero logró un retroceso sin precedentes en Gualeguaychú”, apuntó también hacia el presidente municipal de Gualeguaychú.
Y afirmó: “No soy un hombre de odios, ni de aprietes, acá hay diálogo y en el disenso he cedido y logrado cosas en la ciudad, por eso me extrañan las palabras de (José) Cáceres, que siempre fue prendido de pantalones de otros que tenían votos y es vicegobernador por el precio de la traición a su otrora Jefe y por quien lloraba y golpeaba su pecho en los palcos”.
E insistió: “Ese palco es odio y resentimiento, quizá por eso pueden mostrar los escasos seguidores que no sumaban más de 60 personas rentadas de la localidad y que desde ciudades vecinas y con promesa de abundante vino y choripán fueron a un acto donde la noticia era `nos juntamos para pegarle a Dani Rossi´”.
“Yo cuando me junto con compañeros lo hago para hablar de política, por eso aún tengo amigos en cada rincón de la provincia y tengo autoridad para charlar y mantener mis convicciones peronistas intactas, no soy ni me autoproclamé kirchnerista o menemista como ellos, siempre acompañé a la mejor propuesta, he ganado y perdido elecciones pero siempre estoy y estaré con mi pueblo que eternamente me acompañó para transformar esta ciudad. Mi único jefe es Juan Perón, y quizás mi único pecado fue tener un pensamiento peronista y con mi bastón de mariscal tratar de aportar para mejorar nuestro querido Partido Justicialista, ya lo decía el general `Los partidos políticos triunfan o son destruidos por sus conductores. Cuando un partido político se viene abajo, no es el partido político quien tiene la culpa, sino el conductor´, y espero esta dirigencia no nos lleve a la destrucción”, concluyó.