Echagüe comenzó con todas las luces, un cuarto altamente positivo tuvo el AEC ya que fue efectivo, concretó las ofensivas producidas y a pesar de que su adversario se mantuvo arriba cuando mediaba la mitad del chico, se encontró firme para pasar arriba (13-14). A partir de ahí comandó el tanteador. Una falta y vale sobre Ruiz Moreno determinó tiempo muerto para el adversario que quedó abajo por cinco puntos (13-18). Las últimas jugadas sirvieron para los que locales descuenten, pero no les alcanzo y por eso Echagüe se llevó el cuarto (18-16)
Echagüe seguía mandando en el juego, y la segunda parte arrancó con un doble de Stival que sirvió para estirar la diferencia. Y así siguió el Negro, firme, concentrado y estable. La regularidad se presentó como el arma fundamental para esta historia. Un trabajo colectivo, productivo y eficaz. Porque se impuso, en estos momentos del partido, en defensiva, pero por sobre todas las cosas en la faz ofensiva.
Stival y Carnovale, más Ruiz Moreno, junto al trabajo de Kirkland fueron importantes para escaparse en el tablero. Recién sobre el final despertó Villa Ángela, y achicó una diferencia de ocho puntos que había sacado el equipo de Paraná. Pero de igual manera, los paranaenses siguieron arriba y cerraron el primer tiempo con cuatro de ventaja (31-35).
El complemento
Parejo continuó el arranque de la segunda parte del encuentro. Los equipos se mostraron eficaces en el aro rival, palo a palo, así estuvo el juego. Un poco mejor inició el partido el local pero de igual manera el trabajo de Echagüe fue efectivo para mantenerse arriba (43-44).
El partido se tornó duro, con mucha rudeza en los cruces y marcas férreas. El AEC no se dejó avasallar por el conjunto local, la gente también influía con sus cánticos, pero Echagüe siguió firme y sacó una diferencia de tres puntos sobre los últimos segundos para cerrar de la mejor manera el chico (45-48).
A full salió Echagüe y con un doble de Cabello marcó el camino. De igual manera rápidamente respondió el elenco anfitrión. Pero un triple de Morales puso un manto de silencio en el estadio (47-53).
Pasaron los minutos y el Negro no mermó en su producción y con cinco minutos jugados de los últimos 10, se posicionó arriba por siete (50-57). Aunque, Villa Ángela siguió cerca, no se despegó y rápidamente se puso a tiro (57-59).
Cuando los locales se pusieron a uno 59-60, con un triple de Ruiz Moreno y un doble de Kirkland, Echagüe volvió a respirar y se escapó a seis. Además González aportó los suyo y eso derivó en un tiempo muerto de Villa Ángela. Después el elenco paranaense continuó trabajando de manera eficiente para cerrar el partido en su favor por 71 a 65 para la visita.