Tomás de Rocamora cayó por 103 a 76 en su visita a Lanús, por una nueva fecha de la Conferencia Sur de la Liga Argentina de Básquet. En el Granate se destacó Lorenzo Capponi con 18 puntos (4/5 en triples) y tres rebotes, además del aporte de Martín Franchino con 15 unidades y tres recobres y la labor de Andrés Lugli con 14 asistencias, siete rebotes y siete tantos. En el Rojo sobresalió Matías Caire con 17 puntos (3/6 en triples) y cinco rebotes.

El partido

El pleito se inició con paridad y configurado en la apuesta a la pintura del local, donde facturó Alorda (7) y el corrimiento de la cancha del visitante. Lanús tomó una leve distancia 15-10, a falta de cuatro minutos. Sin embargo, con la zona 2-3 (obligó al rival a tirar 2/10 en triples) y la velocidad de transición, Tomás de Rocamora clavó un pasaje 7-0 para clausurar en ganancia 17-15.

La segunda unidad del Granate trajo réditos en el comienzo del segundo cuarto, con la energía y goleo de Franchino (6) para optimizar la presión defensiva colectiva y salir disparado en contraataque. Por eso, el dueño de casa arrolló al Rojo con un parcial 20-2 para escaparse 35-19, con 4:30 minutos en el reloj. Los triples de Lanús se transformaron en un arma letal (5/8) y el visitante respiró con las decisiones de Cavallín (6). Así se bajó la cortina del primer tiempo con una renta clara del local 46-29.

Tras las charlas en vestuarios, el elenco de Saborido marcó la máxima 50-29, al minuto de juego. Empero, Rocamora reaccionó con Caire (8) y Frontera (9) y limó la brecha hasta acercarse 55-44, a los cinco minutos. En un trámite algo desprolijo, Lanús aceleró y volvió a acaparar una renta considerable para cerrar adelante 75-52.

En el último episodio se profundizó el predominio del Grana, que no aminoró el ritmo y la convicción, con buenos momentos de Di Muccio (8) y Patterson (8). En la visita se destapó Candia (11) con buenas acciones individuales. Empero, la supremacía del local se agudizó y terminó con mucho brillo para concretar un triunfo inapelable.