
En una charla realizada en España, Marcelo Bielsa elogió al entrerriano Gabriel Heinze.
Marcelo Bielsa brindó hace unos días una charla organizada por la Real Federación Española de Fútbol en la que habló de tácticas en el fútbol de hoy, pero también se animó a desclasificar algunas anécdotas con la selección argentina que le sirvieron para ejemplificar.
El Loco aseguró que, en caso de poder volver el tiempo atrás, al margen de hacer el curso de entrenador, estudiaría psicología para entender cómo funciona y se articula la mente de los futbolistas con las exigencias de una competencia, más que el profesorado de educación física del que se recibió. El seleccionador de Uruguay explicó que el manejo de las emociones es trascendental a nivel individual y grupal. Puntualizó en dos ex futbolistas Albicelestes: Juan Pablo Sorín y el entrerriano Gabriel Heinze.
“Sorín (presente en la charla) era un impulso de emociones que llegaban a todos lados. Él no las necesitaba porque se abastecía a sí mismo de emoción, pero ver su capacidad de emocionarse nos hacía más fuertes a todos”, recordó.
Y prosiguió con el Gringo: “Era un jugador de muy pocas palabras, pero un líder silencioso que convencía por lo que transmitía y no lo que decía. Cuando estábamos a punto de salir al campo, se paraba en ese ramillete de jugadores que están por salir y decía una frase que nunca olvido. ‘A correr y darlo todo’. Yo la esperaba la frase. Yo era más fuerte si escuchaba la frase y más débil si él no estaba o si no la escuchaba. Había ocasiones en las que los jugadores salían al campo antes de que yo alcanzara a estar con ellos y yo sentía ese vacío”.