Los comerciantes del microcentro de Paraná advirtieron de una situación cotidiana en el marco de la cuarentena en la capital provincial.

Es habitual el control de tránsito instalado sobre calle 25 de Mayo en uno de los costados de la plaza 1° de Mayo. Ese operativo está a cargo de un inspector de apellido Moreyra que maneja la zona a su gusto impidiendo el normal desarrollo de los comercios del lugar. El hombre en cuestión estaciona en un lugar prohibido su vehículo todos los días. Eso impide que los camiones distribuidores que abastecen los emprendimientos gastronómicos de la zona puedan descargar la mercadería. 

No sólo se permite a sí mismo estacionar en una zona indebida, sino que autoriza al resto de los inspectores a que estacionen sus motos en el mismo lugar. Es decir, los que controlan que no estacione el ciudadano de a pie, estacionan en ese lugar. 

Además, ANÁLISIS supo que el inspector Moreyra no deja que paren en ese lugar las motos del delivery de los comercios gastronómicos, que trabajan en dicha modalidad debido a la autorización del Municipio en el marco de las medidas de aislamiento por la pandemia.