¿Cómo es que llegamos acá?

Edición: 
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“Buenas tardes. Queríamos vivir bien cuando nacimos; cuando crecimos, queríamos ser Suiza. Tener nuestra tranquilidad, nuestro aburrimiento, nuestros electrodomésticos. Un número definido de drogadictos, de pedófilos, de indeseables, clasificados uno por uno, con sus códigos de barras en los brazos, impresos debajo de los nudos eternos de la BCG. También queríamos un sistema de doble oportunidad para los más lentos y prosperidad para todos. Que nos pusiéramos de acuerdo para resolver los problemas, a veces dándote un poco a vos y vos dándome un poco a mí. Sin puñaladas, paisano. Usando la cabeza. Sin abusar, sin manipular, sin dejar llorando a nadie, porque cuando el dólar está barato somos los que nos reímos mucho juntos en un hostel de Berlín.

Ahora, compañeras y compañeros, lo decimos en voz alta, lo decimos en esta tribuna y sin rodeos, nos vamos a cobrar este tremendo pijazo de veinticinco años, y contando, porque no somos nosotros los responsables de las cosas tristes que van a pasarle a la patria. No era la idea en lo más mínimo que todo terminara tan mal, tan asquerosamente mal. Es cierto que nos costó mucho tiempo ver esta realidad como un hecho que estaba consumado en el arranque mismo. Lo que pasa es que la esperanza es un sentimiento demencial y, como la desilusión no mata, el ciclo de ilusión y desencanto puede repetirse al infinito. Y bueno, aunque sea inaguantable, ya captamos la idea. Que lo que tenga que pasar pase, entonces, y si se puede elegir nos gustaría que la próxima calamidad tarde en mostrar el látigo porque no tenemos ninguna ansiedad para la desgracia. Mil disculpas por esta pasividad que los activistas más jóvenes juzgarán tan mal, pero estamos dispuestos únicamente a sacrificios que nos mantengan integrados en el mercado durante los años que califiquemos como competitivos, y al solo efecto de evitarnos una vejez monstruosa.

(El texto se publica completo en la edición gráfica de ANALISIS de esta semana)

Deportes

Matías Russo y Vittoria Piria

El piloto entrerriano Matías Russo, junto a su compañera Vittoria Piria, conducen un Porsche.

Unión

Lucas Gamba estableció el empate para el Tatengue en retorno de Leonardo Madelón.

Patronato

El Santo se impuso 2 a 1 en el clásico ante el Decano en el predio La Capillita.

Racing

La Academia festejó gracias a un agónico gol en contra y eliminó a la Lepra del Torneo Apertura.

Unión

Unión de Crespo fue uno de los que ganó este jueves, fue frente a San Martín de Gazzano.

Argentina

Argentina tiene confirmadas días y sedes para la doble jornada de Eliminatorias Sudamericanas.

Opinión

Por Claudio Jacquelin (*)

Dibujo de Alfredo Sábat para La Nación.

Judiciales