En una audiencia con posiciones encontradas entre la acusación y la defensa, se pidió declarar nulidades sobre una de las imputaciones en el aberrante caso de la violación de dos menores en uno de los vagones abandonados de la estación ferrocarril Racedo de Paraná. El hecho lleva más de tres años de investigación. En un primer momento se imputó a siete uniformados. Dos fueron sobreseídos inmediatamente y tres acordaron penas de prisión condicional, por abuso sexual simple. Ahora, sobre los señalados por la violación de las menores, próximamente la Fiscalía pedirá la remisión de la causa a juicio.

El hecho denunciado sucedió la madrugada del martes 5 de julio de 2016, cuando dos nenas de 13 y 14 años fueron abusadas por policías que se desempeñaban en el destacamento ubicado en calles Pascual Palma y Pronunciamiento, consignó Uno.

Según se desprende del expediente, las adolescentes habían salido del hogar del Consejo Provincial del Menor Adolescencia y Familia (Copnaf) Mujercitas ubicado en calle 9 de Julio de Paraná, y comenzaron a deambular por el predio del Ferrocarril. Allí funciona el destacamento perteneciente al área de Seguridad Deportiva de la Policía de Entre Ríos. Las víctimas fueron ultrajadas por efectivos que se encontraban de guardia, en uno de los vagones abandonados.

La situación salió a la luz luego de que una de las menores recibiera atención médica en el hospital materno infantil San Roque. Inmediatamente los médicos dieron inicio al Protocolo de Abuso Sexual correspondiente. Si bien en un primer momento se pasó a disponibilidad a toda la guardia para transparentar la investigación, después se supo que muchos policías no tuvieron nada que ver. Finalmente fueron cinco los imputados, con diferente participación en el hecho.

En 2017 se presentó un acuerdo de juicio abreviado, donde tres de los cinco policías acordaron las penas condicionales. Se tuvo en cuenta que, en un primer momento, estaban en el vagón con las menores, donde abusaron de las menores en lo que se denomina “abuso simple”; pero luego se retiraron sin saber lo que los compañeros que quedaron allí iban a hacer en su ausencia. Uno de ellos tenía además la imputación por falsificación de documento público, ya que alteró algunos nombres y horarios en el libro de guardia del destacamento, con el objetivo de beneficiar a algunos policías en el hecho investigado. Este acuerdo fue rechazado. Dos años después, en diciembre de 2019, se volvió a presentar el abreviado, también con penas condicionales, que finalmente fue homologado.

La audiencia de ayer fue para discutir acerca del error marcado por los defensores de uno de los acusados, Iván Vernengo y Damián Petenatti, en una de las imputaciones formuladas. El planteo fue formulado a la jueza de Garantías Marina Barbagelata, y la fiscal Valeria Vilchez, se opuso. La jueza deberá resolver al respecto e informará su decisión el lunes. Luego de esta última instancia, la Fiscalía solicitará la remisión a juicio de los policías imputados por Abuso sexual con acceso carnal agravado.