Minitah, amistad, risas y un escenario compartido

Por G.G.d.R.
Hay historias que comienzan en grandes escenarios y otras que nacen en lugares más íntimos. La de Minitah, con Caro Rossier, Dani Rudel y Pauli Chilotegui, empezó en un patio, con el verano de enero en Paraná, y tres mujeres sentadas alrededor de una mesa con una cerveza compartida. “Fue así de simple: nos miramos y dijimos es ahora. Esa tarde nació el grupo”, recuerdan con una sonrisa que todavía guarda la chispa del comienzo, en diálogo con ANÁLISIS.
Lo que parecía un encuentro de amigas terminó siendo el inicio de un proyecto que ya conquistó a Paraná. Caro Rossier, Dani Rudel y Pauli Chilotegui se conocieron en un taller de stand up en 2023 y, desde entonces, nunca dejaron de compartir. Primero fueron charlas, luego ideas sueltas, más tarde escenarios. Hasta que Minitah tomó forma: un nombre juguetón, un estilo propio y una certeza común: la risa se vuelve más grande cuando se comparte.
“En el stand up suele ser todo muy individual, pero nosotras sentimos que juntas era más divertido. Las ideas circulan distinto, se transforman, crecen. Y además nos acompañamos en todo”, cuentan. Esa complicidad se percibe incluso cuando no comparten escena: cada una tiene su monólogo, su ritmo, su forma de mirar al público, pero el hilo conductor es innegable y es la pasión por hacer reír.
Cada función de Minitah está atravesada por lo que ellas llaman “el toque Minitah”. Vestuario pensado, luces que juegan con las sombras, una alfombra que delimita el escenario, y hasta fotos previas que capturan la esencia de cada show. “No se trata solo de subir a hacer reír, sino de crear un clima, de cuidar el momento para el público y para nosotras”, explican.
Aunque el material está escrito y ensayado, siempre hay margen para la improvisación. “El público interviene, comenta, y ahí surgen ocurrencias que nos sorprenden. A veces esos momentos generan chistes nuevos que incorporamos después. El guion nos da la seguridad, pero la risa compartida nos da alas”, dicen.
El proceso creativo es un entramado de reuniones, ensayos y charlas de WhatsApp. “A veces una manda un audio contando algo cotidiano y ahí aparece un chiste. Nos divertimos mucho en el proceso, porque la risa empieza antes, en los ensayos y hasta en los mates previos al show”, reconocen. Esa dinámica también se refleja en cómo manejan los nervios de cada función: “Una de las ventajas de ser tres es que nos contenemos. Si alguna está ansiosa, las otras sostienen. Arriba del escenario se siente: estamos juntas, nunca solas”, cuentan.
(Más información en la edición gráfica de la revista ANALISIS, edición 1163, del día 21 de agosto de 2025)