Unión de Santa Fe, equipo dirigido por Miguel Oyeras, cosechó su segunda derrota consecutiva, esta vez como local, ante Nueva Chicago, por 1 a 0. El gol lo convirtió Fabricio Simone a los 25 minutos del complemento, ante un descuido de Roberto Trotta.

Los rojiblancos buscaban la recuperación, luego de la dura derrota sufrida a manos de Godoy Cruz el sábado, cuando cayeron derrotados por 5 a 1. Pero jugando un muy mal partido, cosecharon su segunda derrota al hilo ante un muy ordenado Nueva Chicago.

El libreto de la visita fue claro desde el primer minuto de juego; no desarmar nunca las dos líneas de cuatro y aprovechar los espacios que Unión dejaba cuando atacaba.

El local no tuvo claridad y sufrió a horrores la mala noche de César Pereyra y Sebastián García, quienes se mostraron sumamente imprecisos a la hora de jugar.

Tampoco fue solución Ricardo Pérez por el carril izquierdo del mediocampo, quien se vio superado casi permanentemente por Germán Basualdo y Gómez, un lateral incansable que hizo un surco por el carril derecho.

En la primera etapa casi no hubo situaciones de gol frente a los arcos, a excepción de un cabezazo de Fabricio Simone que se fue cerca del palo derecho de Tauber.

En el complemento Unión pudo abrir el marcador al minuto de juego, luego de un centro de Urresti que Soto despejó casi sobre la línea, cuando Battión se disponía a empujarla.

En ese primer cuarto de hora los tatengues tuvieron otras dos situaciones claras de gol; un cabezazo de Pérez que se estrelló contra el palo y otro de Pereyra, que fue rechazado sobre la línea.

Pero Chicago volvió a emparejar el partido y no sólo eso, sino que también empezó a manejar la pelota a través de Basualdo y Ramiro Leone, más la movilidad de los dos puntas, Simone y Pérez.

De todas maneras, le costaba superar a la última línea rojiblanca, que tuvo en Trotta a su punto más flojo y a un Mosset otra vez impasable, esta vez como stopper.

A los 25 minutos, Gómez envió un lateral al área para Simone que de espaldas al arco, desacomodó a Trotta y desde un ángulo difícil le cruzó la pelota a Tauber, que no pudo hacer nada.

Unión no tuvo respuesta; Oyeras probó con Bassó, Donnet y Torres, que estaban en el banco, pero nada cambió.

La derrota preocupa, por ser la segunda de manera consecutiva, pero sobre todo, por que el equipo mostró un nivel de juego muy pobre, con el que se le hará difícil obtener resultados.