El ex titular del Centro Integrador de Servicios Ciudadanos de la Municipalidad de Paraná, Roberto Sabbioni, se refirió a la postergación de las elecciones internas de la Unión Cívica Radical (UCR). También analizó la actual gestión municipal.  

En declaraciones realizadas al programa A Quien Corresponda (Radio De la Plaza), Sabbioni aseveró que “es entendible” la postergación de las internas del radicalismo porque “en una interna no va la vida, es cuestión de esperar y nada más”.

De todos modos, planteó que “se cuestionan a veces las malas intenciones o que no se hagan las cosas como debe ser”. Como ejemplo, mencionó que “la fecha de elecciones era el domingo que viene y recién el lunes habían pedido las escuelas, con lo cual es como que ponen el carro atrás del caballo”. “Es la discusión que tenemos en el radicalismo en cuanto a que se hagan las cosas bien, pero la suspensión era previsible porque no es un chiste esto de la enfermedad y del segundo avance del Covid”, sentenció.

Consultado por las expectativas de participación en las internas, el dirigente sostuvo que “al no haber demasiados competidores, es como que algunos apuestan a que vaya poca gente para que sea un fracaso. Es la situación del radicalismo, no lo medimos por cantidad de gente sino por voluntad y por la idea de representar algo renovado, ideas renovadas no sólo gente”.

“Están las ideas y los sistemas que queremos cambiar, y en eso estamos totalmente de acuerdo, pero en cuanto a la participación de la gente no hay una motivación popular o que haga pensar que irá una gran cantidad de gente. El radicalismo viene muy mal, tocamos fondo con conducciones que no han hecho absolutamente nada”, reflexionó.

En ese sentido, planteó que “hay que revisar todo, el radicalismo tiene que ser el eje de cualquier discusión y hasta ahora hemos sido convidados a los antojos del PRO, cosa que no vamos a permitir pero para eso hay que tener un radicalismo fuerte, con conducta, con convicciones e ideas claras”.    

Al respecto, insistió en que “todos hablan de lo mismo pero llegado el momento no hacen lo que dicen” y diferenció a su sector: “Pensamos hacer lo que decimos y por eso hemos llegado a esta instancia”. “Hoy al no participar viejos dirigentes hace que esto se torne medio apático, y la gente se desmotiva. Algunos –so pretexto de la famosa unidad- no participaron, pero creo que es por temor a no hacer un buen papel y no tiene nada que ver con el tema de la unidad. Por no tener internas, se aceptó durante muchos años ir llegando a acuerdos, que han sido acuerdos de cúpula, y así estamos”, analizó.

La gestión Bahl en Paraná

Al momento de hacer un análisis de la gestión municipal de Adán Bahl, Sabbioni dijo que “aparentaba otra cosa, se le han venido abajo algunas cuestiones y la experiencia no le ha dado resultado”.

Criticó que “son sumamente cerrados y están equivocando los caminos” y advirtió que “comenzaron bien porque no llovía, no crecían los pastos, no había mucho por hacer y estaba la pandemia. Pero ahora se terminó esa historia y por más pandemia que haya tienen que trabajar, el empleado municipal no está bien y si el empleado municipal no está bien, la Municipalidad no funciona”.

“Esto de no confiar en los empleados municipales y traer policías retirados, dan su mínimo resultado en cuanto imponen miedo, pero hasta que se les va el miedo. No es cuestión de traer gente que sabe de la materia y del municipio, sino gente que vino a hacer control y hay una inversión bastante importante en ese tipo de funcionarios”, criticó.

“Yo he criticado lo necesario, critiqué la planta asfáltica que hoy tienen una isla en esa primera bomba, donde en su momento hice un canal que generó muchas críticas y resulta que después lo único que hicieron fue perfeccionar el canal cuando tenían a mano la solución con la draga que tiene la provincia y está parada en Islas. Todo está pendiente en futuras obras, de los pozos que no le han dado ningún tipo de resultado –que fue volver muchos años atrás- porque algunos ya no pueden funcionar porque el agua no está para consumo humano”, puntualizó.  

Agregó que “en su momento acertaron en su momento pero ahora se están rompiendo los camiones” y recordó que terminó su gestión “con siete camiones, y parecía que éramos unos ineptos y no cumplíamos con el cargo como correspondía”.

Consultado por las responsabilidades de su gestión, afirmó: “Siempre que actué –tengo tres gestiones en la Municipalidad- lo hice a conciencia y no por una cuestión personal. Cuando presenté la renuncia no se me aceptó, que era mucho antes, y no lo iba a hacer al final yéndome como una rata. Hubo varias cuestiones, los accidentes de Varisco, una secretaria de Economía que me sacó del Presupuesto para arreglar una cuenta con Enersa; y todo eso hizo que uno pareciera un desprolijo. Había un contador municipal que ya se jubiló y que trabajaba de forma espectacular y jamás me hizo meter la pata. En tres gestiones no he tenido una sola carta documento por una cuestión mal hecha. Eso por un lado me enorgullece y por otro lado me da cierto enojo por no haber podido hacer las cosas como yo quería”.