Atlético Paraná dominó en la primera mitad pero la falta de contundencia le volvió a jugar una mala pasada. Los dirigidos por Cervilla dominaron la pelota y generaron varias ocasiones de peligro, sin embargo les faltó la puntada final para abrir el marcador ante un nutrido estadio Pedro Mutio.
El Decano, que había inquietado con Vercellino y Muñoz, tuvo una chance nítida en los pies de Benítez sobre el cuarto de hora y luego de sorprender mal parada a la defensa visitante, sin embargo Tincho no pudo definir cómodo tras un pase de Torres. Luego, Vercellino sacudió un palo en un tiro libre y Alzugaray despilfarró otra ocasión con un remate desviado.
Chaco For Ever se vio superado por el Rojiblanco y apenas acercó peligro en un contragolpe que el experimentado Mosevich no pudo culminar en gol. Antes del cierre de los primeros 45 minutos, Benítez fue el que no logró festejar el primer tanto de la noche luego de un gran avance.
En el inicio del complemento, el conjunto de Cravero pareció intentar una reacción y generó peligro con dos llegadas consecutivas. Primero, Crusat le tapó el gol a Fragatta pero dio un rebote hacia delante y Cortéz se lo perdió con el arco a su disposición. Sin embargo, esa tibia respuesta duró muy poco y el local retomó las riendas del partido.
A los 19’, Muñoz cabeceó a las manos de un bien ubicado Panero, que comenzó a convertirse en el gran sostén del cero en barrio San Martín. El arquero le negó el gol a Alzugaray, Muñoz y Vercellino, quien tuvo chances a los 25 y 31 minutos. Pero la resistencia Albinegra se quebraría a los 33 minutos, cuando Muñoz capitalizó un centro desde la derecha y puso el 1-0 con un cabezazo bien colocado.
A partir del gol, Chaco For Ever arriesgó en la búsqueda del empate y buscó tener la iniciativa, mientras que el Gato buscó defender la mínima diferencia y ceder terreno, a la espera de un contragolpe que le permita definir la historia. Y tuvo chances para eso, porque Trinidad se lo perdió con pierna derecha por encima del travesaño en el área chica y Benítez no pudo culminar bien una contra en tiempo cumplido.
El nerviosismo propio y las urgencias de la visita llevaron a Paraná a refugiarse y el Albinegro estuvo cerca de empatar el partido con dos llegadas sobre el final que tuvieron como protagonista a Girón. A los 44, el delantero que ingresó desde el banco tiró cruzado pero Crusat le contuvo el remate y a los 47 definió apenas desviado del poste derecho, tras el rebote en un defensor. Los cinco minutos añadidos por el árbitro Baigorria pasaron lentamente para los locales, pero la espera valió la pena porque los tres puntos, el desahogo y la algarabía inundaron el Pedro Mutio.