En esta etapa se realizan “evaluaciones económicas previas, en función del tránsito inducido, costo de obra y tasa interna de retorno y otros indicadores”, explicó.
Por otro lado, se ejecutan “estudios de prefactibilidad ambiental, urbano y territorial; y otro que involucra estudios sociales de movilidad”.
A esto se suman evaluaciones “sobre cuestiones hidrológicas y geológicas, más el componente legal institucional”, puntualizó Federik.
El funcionario indicó que de resultar positivos estos relevamientos, ambas provincias junto a Nación estarán en condiciones de hacer las contrataciones necesarias para avanzar en el proyecto ejecutivo.
Por último, informó que hasta ahora se manejan tres hipótesis de localización del enlace: “Son tres alternativas con costos e impactos diferentes”, aseguró Federik en declaraciones a APF.