Uruguay consiguió la histórica clasificación para la semifinal del Mundial de Sudáfrica. Por penales, y con la definición de Abreu picando la pelota, el equipo de Tabárez se metió en los cuatro mejores y ahora deberá pensar en Holanda, su rival en la semifinal.
Fue un partido discreto, con un final a pura emoción. Empataban 1-1, y en la última jugada del partido Luis Suárez le sacó en la línea, y con la mano, el gol a los africanos: fue expulsión y penal para Ghana. Gyan Asamoah, el goleador del equipo, fue el encargado de patear. Se podían convertir en el primer africano en entrar a la semifinal de una Copa del Mundo, pero la pelota se estrelló en el travesaño y salió.
Allí se desató el festejo charrúa. Llegaron a los penales y la suerte estuvo a favor de Uruguay. Muslera atajó dos penales seguidos y Abreu fue el encargado de definir la serie picándole la pelota al arquero Kingson. Así La Celeste se metió a la semifinal de un Mundial después de 40 años, y ahora deberá pensar en Holanda, rival que enfrentará el martes de Ciudad del Cabo, por un lugar en la final.
En los 90 minutos Uruguay y Ghana igualaron 1-1. En el primer tiempo ninguno de los dos equipos dominó la pelota ni las situaciones, aunque fue Uruguay quien propuso un poco más que los africanos. El más peligroso fue el goleador celeste, Luis Suárez, que probó dos veces a Kingson, quien respondió de buena manera.
Cuando se iban a los vestuarios, Ghana encontró el gol con un remate e media distancia de Muntari. El jugador de Inter probó desde casi 35 metros y encontró mal parado a Muslera, que no pudo parar el tiro, da cuenta Cancha llena.
Los africanos se fueron al descanso con la ventaja, pero en el complemento Uruguay se repuso rápidamente y encontró el empate en los pies de Diego Forlán, quien a los nueve minutos, de tiro libre, empató el marcador. El equipo del Maestro Tabárez siempre buscó un poco más que su rival, aunque le faltó profundidad y vocación ofensiva para generar más peligro contra el arco de Ghana, que apostó al juego de contra para complicar a Muslera.
En el tiempo suplementario los dos jugaron para no perderlo, y en la última del partido Ghana tuvo el triunfo: una mano de Suárez fue penal para los africanos y expulsión del goleador. Gyan Asamoah fue el encargado de patear, fue al medio, travesaño y afuera. La decepción de los africanos por haber perdido su oportunidad se trasladó a los penales.
Desde los 12 pasos, Muslera y Abreu se vistieron de héroes. El arquero le atajó los penales a Mensah y Adiyiah. Forlán, Victorino, Scotti y Abreu, picando la pelota, convirtieron para Uruguay que se volvió a meter en la historia de los mundiales: 40 años después es semifinalista, y el martes podrá escribir otro capítulo.