“Había trabado la puerta por dentro y cuando llegué había un Policía adentro. Me rompieron la puerta, me sacaron las cosas.
Ahora no sé a donde voy a dormir”, expresó en declaraciones a El Once.
El hombre vive con su hija y su nieta de 3 años, y su casa fue rematada por una deuda contraída en 2001. Bahl tomó un crédito de 700 pesos hace 10 años en el Banco del Suquía. Poco tiempo después fue despedido, vinieron los federales y el banco quebró. Hace poco le remataron la casa y una orden judicial ordenó el desalojo.
“Mi hijo que vive acá al lado me permitió dejar las cosas aquí. Vive en matrimonio, con tres chicos y ahora se hará cargo de mi hija y nieta. Para mí no hay lugar porque la casa es chiquita”, expresó Bahl.
Seguidamente subrayó: “Es mi única vivienda y tengo que hacerme cargo de un mal gobierno. Esto no es justo”.