Fútbol olímpico: México le negó a Brasil la posibilidad de lograr el oro

Si fuera una película de terror, tendría todos los condimentos posibles para que los espectadores brasileños sufran hasta las últimas consecuencias. Pero es fútbol, y entonces, al ser realidad y no ficción, el dolor es aún mayor. Por tercera vez en su historia, Brasil pierde una final olímpica en fútbol, y la medalla dorada sigue siendo una cada vez más pesada cuenta pendiente para su rica historia.

Así como en Los Ángeles 1984 fue Francia y en 1988 la Unión Soviética, en esta ocasión, el villano de turno fue México y el protagonista, Oribe Peralta, autor de los dos tantos en el claro 2 a 1 en favor de la Tricolor, en Wembley. El agónico descuento de Hulk sólo sirvió para decorar el resultado y ponerle algo de emoción a los segundos finales.

El equipo de Mano Menezes, de floja campaña en todo el torneo de Londres 2012 y que padeció contra equipos hipotéticamente inferiores como Bielorrusia en la fase de grupos y Honduras, en los cuartos de final (con ambos comenzó perdiendo), esta vez nada pudo hacer ante un rival que se encontró con un gol a los 25 segundos de juego, y que manejó con criterio e inteligencia los nervios propios y ajenos.

Neymar se suma a una enorme lista de grandes cracks brasileños que ven frustrados sus sueños de coronación olímpica. Hoy es el delantero de Santos, como antes fueron Romario, Ronaldo, Bebeto, Dunga, Kaká, Ronaldinho y tantos más.

Edición Impresa