Molina manifestó que “tendría que haber hecho la resolución que diga que se realice el entrecruzamiento de los datos, pero eso aún no se hizo, y el por qué, lo desconozco”.
En este sentido, la letrada añadió: “Desde mi punto de vista, esto que se debería dar antes de la feria judicial”. De inmediato, lamentó que “los tiempos de los fiscales no sean los mismos que los de los jueces. Yo lamento mucho esto porque trabajamos mucho para que se de”.
Molina afirmó días atrás, que no hay “ninguna duda de que esas muestras son de los chicos”, por lo cual pidió que sea comparado de manera “urgente” con las más de 2.500 muestras almacenadas en el Banco que funciona en el Hospital Durand.
“Es un trámite que no puede llevar más de tres o cuatro días, así que antes de fin de año tenemos que tener la verdad”, sostuvo.
Al conocerse que pudo obtenerse un perfil genético femenino y otro masculino de las muestras de saliva y hemáticas, la magistrada ordenó a los peritos que le entreguen un informe donde hagan constar sin lugar a dudas a quién pertenecen las muestras estudiadas.
Una vez que la jueza posea ese informe y resuelva sobre la validez legal del uso de esas muestras, deberá ver si ordena el entrecruzamiento en general o lo hace primero con dos familias querellantes en la causa y después amplía el estudio.
Los Noble Herrera habían entregado la sangre y saliva con la condición de que se cotejase sólo con las dos familias querellantes, pero luego la Cámara Federal de San Martín, amplió el objeto procesal del caso a pedido de Abuelas de Plaza de Mayo y ordenó una comparación general, algo a lo que Felipe y Marcela se oponen, consignó Télam.