Demonte está procesado en la causa Área Paraná y entre otros delitos se lo acusa de haber asesinado en avenida Ramírez al militante Pedro Sobko, quien continúa desaparecido. Este planteo se presentó en diciembre, a través del abogado Guillermo Retamar y la jueza interviniente, Beatriz Aranguren, falló en contra recientemente, según pudo determinar el diario Uno.
El represor, en un intento por frenar el avance de la causa, pidió la excepción de competencia entendiendo que debe intervenir el Consejo Supremo de las Fuerzas Armadas. Su argumento fue que durante los años de la represión ilegal se desempeñó como efectivo de la Policía Federal, que actuaba bajo las órdenes de las Fuerzas Armadas.
Por la querella se opuso la abogada de la agrupación HIJOS Regional Paraná, María Florencia Amore, quien sostuvo que no correspondía la intervención de tribunales especiales, lo cual es lisa y llanamente inconstitucional.
A su turno, la Fiscalía dictaminó en contra del planteo remarcando la necesidad de hacer una distinción entre el derecho disciplinario y los delitos cometidos por los miembros de las instituciones militares. El fiscal José Ignacio Candioti citó el fallo “López, Ramón Ángel” de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, que entendió que el Código de Justicia Militar es inconstitucional por no respetar las garantías penales y procesales mínimas que exige la Constitución Nacional y los pactos internacionales.
Finalmente Aranguren rechazó el planteo de la defensa y valoró que en la causa Área Paraná se investigan delitos de lesa humanidad presuntamente cometidos por Demonte, como los de homicidio calificado y privación ilegal de la libertad durante la última dictadura cívico-militar. También citó un fallo reciente de la Cámara Federal de Apelaciones de Paraná en un planteo similar del represor Ramón Genaro Díaz Bessone.
El defensor Retamar apeló la resolución de Aranguren ante la Cámara. Mientras tanto, la causa Área Paraná avanza en su trámite y una vez que finalice la etapa de acusaciones se abrirá la de testimoniales. Aunque el juicio es por escrito, los querellantes esperan que se dé la oportunidad de declarar en forma oral y pública a las víctimas que así lo reclaman.
Demonte fue un efectivo de la Policía Federal y Personal Civil de Inteligencia y según los querellantes era una pieza clave en la ejecución del terrorismo de Estado en la provincia de Entre Ríos. Formaba parte de los grupos de tareas que llevaban adelante los secuestros y torturas de militantes políticos. Está acusado de haber sido quién fusiló en plena avenida Ramírez a Pedro Miguel Sobko el 2 de mayo de 1977. A Demonte también lo sindican como el autor del secuestro en la Facultad de Ingeniería de la UCA, de Victorio “Coco” Erbetta el 16 de agosto de 1976. Ambos aún permanecen desaparecidos.