En una entrevista con Página/12, añadió: “Es que si lo hiciera estaría perjudicando a una institución y desandando el camino de la reforma constitucional de 1994. La nueva Constitución estableció que el Ministerio Público Fiscal tendría autonomía. Que sería engranaje del sistema republicano. Es simple: se trata de diseñar y cumplir los frenos y contrapesos entre los poderes. La Constitución es clara al respecto. Por eso no puede provocar mi renuncia”.
En este sentido, puntualizó: "La Constitución es fruto de un proceso histórico, de conquistas sociales. ¿Quieren que borremos las conquistas de toda la sociedad con el codo? Sería sorprendente que quienes vienen haciendo una bandera de la institucionalidad y la independencia de la administración de Justicia digan ahora que tengo que entregar el cargo porque cambia el gobierno. Si hay gente que imagina otra salida puede prestarle atención a la Constitución y verá que el procedimiento de remoción de la procuradora es el mismo que para cualquier ministro de la Corte Suprema. Hacen falta los dos tercios del Senado. Por eso no renunciar es más que mi derecho: es mi deber. De otra manera estaríamos retrocediendo en logros constitucionales alcanzados en beneficio del Estado de derecho".
De acuerdo con esto, la funcionaria dijo que tampoco renunciaría si se lo pidiese Daniel Scioli o la actual presidente Cristina de Kirchner: "De nuevo: no voy a dar un paso al costado. Sólo voy a retirarme cuando considere que cumplí un ciclo y que puede haber un recambio beneficioso".
"Vine a transformar las estructuras del Ministerio Público Fiscal, que trabajaba como un simple espejo del Poder Judicial. No impulsaba investigaciones, no tenía los planes de perfeccionamiento y articulación nacional y provincial como ya logramos... Nada de eso. Todo este esquema de articulación le permitió al MPF trabajar de manera eficaz en grandes causas de narcotráfico, por ejemplo. Obtuvimos condenas en la operación Carbón Blanco. La Procuración sobre Narcocriminalidad pudo realizar la denuncia contra el juez Raúl Reynoso en Orán. Antes no había una estructura diseñada para cruzar información", añadió.
Sobre las investigaciones sobre el narcotráfico, afirmó: “Sí se está avanzando. Aquí en la Procuración cuando asumió no había ni siquiera una unidad especializada en narcotráfico. La Procunar trabajó con fiscales que apuntaron a las cabezas, en ese caso de las policías. Las provincias articularon. Tenemos unidades de información conjunta en Salta, en Mar del Plata, en Rosario a través de una cuerdo con el gobernador Antonio Bonfatti... Hay cabecillas detenidos. Esta es la manera de trabajar. Con un frente común del Estado nacional, provincial y municipal en el marco de las investigaciones. Por supuesto que nada de esto funciona de manera completa sin políticas públicas y sin acceso a la salud y a la Justicia. Por eso instalamos los Atajo en tantos barrios. Para que sea el Estado el que le da la protección a gente que antes no encontraba un canal denunciar la violencia policial o la violencia de género. Gente que quedaba condenada por su falta de medios, económicos o culturales. Esto es construcción institucional. A veces me parece que no estuviéramos acostumbrados a las instituciones, pero se trata de reivindicar el autocontrol en su sentido republicano. Si cada presidente va a poner a alguien de su confianza con independencia de los tiempos, ¿cuál es el respeto por las instituciones? A mí me votó el 90 por ciento de los legisladores presentes. Supongo que en mí votaron una trayectoria de 20 años en el Ministerio Público Fiscal”.