La Policía de Sudáfrica hizo una requisa en uno de los hoteles en Johannesburgo donde paran barras argentinos y cerca de 40 fueron advertidos por no llevar suficiente dinero para comprar las entradas de los encuentros. En caso de que estén en un radio menor a un kilómetro de los estadios en los días de partido, serán detenidos.
El operativo de las fuerzas de seguridad se llevó a cabo durante la madrugada: se revisó documentación y se fotografiaron todos los pasaportes. Este tipo de investigaciones continuarían en los próximos días en los otros lugares donde se alojan hinchas nacionales.
El trabajo de los oficiales se realizó con la cooperación de los efectivos de la Policía Federal que viajaron a Sudáfrica. Ellos aportaron la logística y actuaron como traductores durante el procedimiento que se extendió por varios minutos y que registró algunos momentos de tensión, TyC Sports.