Gastón Vasquez es poeta, panadero y estudiante de filosofía.
Gastón Vasquez es poeta y panadero o panadero y poeta. Estudia filosofía y tiene publicados algunos libros de poemas con editoriales independientes en Bahía Blanca. La red social Instagram nos permite seguir el trabajo diario de su horno de barro pero además podemos abrir el perfil para leer los versos vértebras de poemas recién horneados.
Por María Belén Zavallo
I
Gastón abre un hueco en la harina, revuelve con sus manos la levadura y agrega agua tibia. Tapa la masa con un lienzo, la cubre como se esconde un lugar para guardar promesas. En su boca se disuelven otros versos. Gastón toma la masa y la divide en bollos. De a poco lo que primero fue polvo ahora es un cuerpo blando. Aparecen letras y forma una palabra tal como la vio antes en un grafitti de una pared en Bahía Blanca. Panpoecía. Y el horno abre su lengua de llamas y dora la superficie de ese pan que anuncia poemas nuevos.
II
Barro, fuego y pan retoman un lazo con otra época. Los abuelos de Gastón eran panaderos, sus raíces cobran vida en el gesto que esparce la harina en la mesada, un latigazo a la libertad. Gastón hace pan con forma de versos. La leña en el horno de barro humea y su recuerdo modifica el paisaje. Fuera de los sistemas de producción masiva, fuera de los mejoradores, de las manos que desdibujan el origen, Gastón amasa y hornea y sale casa por casa a llevar el alimento que es también verbo y verso. Y su sustento.
III
El día que dejó el trabajo en el puerto recuperó “la patria perdida”, su infancia volviendo a la actividad de sus abuelos: amasar y cocer panes. Hace todo en un horno de barro y sospecha que el fuego es reparo y es origen. “Antes viví en la calle y también estuve al lado de la llama en las noches de frío”. Entre medio del proyecto Pan poecía también la vida tuvo que activarse como la levadura con tibieza. Un agua dura en ocasiones estancó la miga pero Gastón también encontró refugio en la lectura por eso estudia filosofía y por eso escribe. Lejos de los moldes que dan una estructura fija, deja nacer el pan y el poema. Lee a Anne Sexton y a Luis Sagasti, a autores fácilmente reconocibles y a los marginados del canon. Gastón mastica ideas como un toro. Se le enciende la garganta hablando de poetas. En su Manifiesto Neo Marroco escribe “la literatura es andar por las huellas y calles que nadie conoce”.
IV
Hace tiempo me vengo preguntando cuál es el lugar del arte o porqué algunos creen que poniendo las cosas en celdas la vida se acomoda. Gastón me muestra una costra de pan quemada. La cáscara ardida brilla como un muslo de yegua al sol. Hay poesía en las manos que se incrustan la masa. En el hijo que revuelve las palabras hasta encontrar la piedra del poema. Hay en el fuego un imán que arrima. En las iglesias el pan alimenta el alma. En las imágenes que Gastón sube a Instagram, la red social que eligió para difundir su trabajo, el alimento es uno con el poema y así logra expandir la metáfora. Marroco sobrevive al lunfardo y al ámbito carcelero y significa pan. El Neo Marroco no necesita mucho, dice, prescinde de ornamentos.
Instagram @panpoecia
Qué es el Neo Marroco?/ Manifiesto
El Barroco
Caracterizado por su exceso
De ornamentación
Fundado en el siglo XVII
Y con varias vertientes
Que confrontaba al Clasicismo.
Ese Barroco
Que Perlongher refundó
Para formar el Neo Barroso
En referencia a las aguas sepias
Del Río de la Plata
Y de la literatura que de alli emanaba.
Marroco
Palabra lunfarda que sobrevive
En ámbitos carcelarios
Y callejeros y que significa pan.
Ese marroco es el que quiero refundar:
El Neo Marroco
Corriente ética y estética
Que se financia con la venta de pan casero
Hecho al horno de barro
Con reminiscencias al Paraguay
Y a la Ilustración
A los tobas y guaraníes
Que hace leña del árbo caído
Que entrega el pan a domicilio
Así como pizzas, tortas materas y chiplús;
El Neo Marroco conoce
Todas las calles de la ciudad
Todos los barrios
Sabe que huella une a Hipódromo
Con el 9 de noviembre
Viajentes del sur con Villa Elena
Harding Green con Espora
Conoce callejones en Bajo Rondeau
Y La Arcada, Cooperación 1 y 2
Aldea Romana Y Juan López.
Sabe que Arlt y Marechal tiene sus calles
Así como Fatone y Jauretche.
Y es que que para el Neo Marroco
La literatura es andar por esas huellas
Y esas calles que nadie conoce
Ni transita.
Por eso se maneja en los márgenes
Entre changarines y albañiles
Cortadores de pasto y costureras
Amas de casa y vendedores ambulantes
Bolivianos y paraguayos
Chilenos y dominicanos
Africanos y venezolanos.
El Neo Marroco une a todos
Los pueblos sudamericanos.
Hace poesía con masa de pan y pizzas
Rinde homenaje a poetas
Y editoriales, compra en ferias
Y a los autores, siempre compra
Nunca manguea y presta
Y regala libros. Aborrece los pdf
Y las fotocopias.Es que el Neo Marroco
Apuesta por la Soberanía literaria.
El Neo Marroco
No necesita mucho
No necesita ornamentación.
Necesita de amigos que respiren en paz
Que coman su pan fresco
En sus casas y departamentos
Que sepan lo que es la poesía
Que es como una canasta de mimbre
Donde se atrasan los trenes
Bajo castaños de plazas aldeanas.
Que sepan eso
Y que sepan también
Como debe morir un poeta.
Gastón Leandro Ezequiel Vázquez. 1980, capital federal. Actualmente reside en Bahia Blanca. Estudiante de filosofía.
Publicó Parresía: el camino de la ética, Katábasis, La galería de los ases y Poecía.