Pablo Rochi

Faltan dos fechas y la definición por el título está caliente. Sin embargo, aún quedan resabios de lo que fue la carrera en La Pampa, considerada una de las competencias más atractivas no sólo de esta temporada, sino de los últimos años.

Y mientras se analiza y se palpita la previa de lo que será la próxima fecha en Trelew, muchos todavía siguen haciendo alusión a lo que pasó en Toay, para los especialistas, la jornada que marcó un antes y un después en el cierre de la Copa de Oro.

“Mariano Werner ganó una carrera para el campeonato”, reconocieron muchos de los pilotos que se encuentran en el grupo de privilegio. Ellos entendieron que la labor del paranaense fue una maravilla y su triunfo lo dejó muy bien parado para lo que resta, por más que Matías Rossi esté solamente dos puntos abajo en las posiciones.

Justamente, Agustín Canapino remarcó lo logrado por el entrerriano. Él es uno de los que pelea por la consagración, aunque entiende que, a dos carrereas del final, hay dos pilotos que son los favoritos.

“Todavía hay posibilidades, pero si no pasa nada con Mariano Werner y Matías Rossi, el campeonato está entre ellos dos”, dijo al respecto.

El Turismo Carretera goza de una definición apasionante, con dos pilotos jóvenes y llenos de talento, pero con un viejo zorro que está ahí, al acecho.

Vale situarse, entonces. Quedan dos fechas para terminar el campeonato, este 13 de noviembre en Trelew y el 4 de diciembre en La Plata. ¿Las posiciones? Mariano Werner es puntero con 141,5 puntos, Matías Rossi lo sigue ahí con 139,3 y Guillermo Ortelli algo más atrás con 111 unidades. Son los tres grandes candidatos, si bien para la mayoría Werner o Rossi levantan la copa. ¿Será? Queda poco, pero con muchos puntos en juego, lo que otorga una gran adrenalina para los que están arriba y cierta ilusión para los que vienen más abajo.

Werner lo sabe. Entiende lo que consiguió y reconoce lo que falta: “Dimos un paso muy importante pero todavía quedan dos carreras. Parece poco pero a la vez es mucho. Lo bueno es que hemos logrado sumar, y mucho, en tres circuitos en los que los Ford no son favoritos. Ahora ya estamos metidos de lleno en la carrera de Trelew. Vamos por otra fecha que también es decisiva”.

El entrerriano sabe que compite contra el resto. Ser puntero significa tener a todos en contra, a la espera de que se caiga para tener más chances.

“Salir campeón no me quita el sueño. Sé y sabemos que estamos peleando con reglamentos que están levemente a favor de Chevrolet. Así y todo, vamos a dejar todo. Cuento con un gran equipo y un gran grupo humano, y eso es clave” dijo como para ponerle paños fríos a la situación.

Claro está, Werner sabe que está delante de una gran posibilidad, que no es sencilla, pero sí alentadora como para escribir su nombre para siempre en la categoría más importante del automovilismo argentino.

(Más información en la edición gráfica número 1050 de la revista ANALISIS del jueves 10 de noviembre de 2016)