El docente y dirigente gremial Pablo Amarillo es el precandidato a intendente de Concepción del Uruguay en representación del Frente de Izquierda de los Trabajadores en Unidad (FITU): "Después de más de 30 años, la izquierda va a tener candidatos locales en Concepción del Uruguay", dijo el dirigente del Partido Obrero que forma parte del frente de izquierda. 

En declaraciones con A Quien Corresponda (Radio De la Plaza 94.7) el dirigente social explicó: "Tenemos la expectativa de ingresar al Concejo Deliberante, queremos lograr el ingreso a la legislatura provincial con Nadia Burgos y para eso necesitamos más de 40.000 votos". Sin embargo, Amarillo aseguró que "más allá de las elecciones y nuestros resultados" lo que buscan desde la izquierda es "discutir con la población lo que viene". "Lo importante es que los trabajadores nos organicemos y recuperemos los sindicatos. Hay que organizarse en el barrio, en el trabajo, en el centro de estudio, para salir a pelear por los derechos que perdimos y los que vamos a perder".

"Las fuerzas principales no discuten si te quitan o no los derechos, sino en cuánto tiempo lo hacen. Lo que discuten las otras fuerzas políticas es como descargan la crisis sobre las espaldas de los que laburamos y nosotros decimos que de una vez por todas, la crisis la deben pagar los capitalistas y tendrán que ganar un poco menos", analizó el docente que compite en Concepción del Uruguay.

Aseguró que en la recorrida por los barrios, lo que primero recogen de la gente es la bronca con el peronismo y Juntos por el Cambio: "En los barrios más empobrecidos se ve un hastío de tanta promesa incumplida, ahora se vuelve a repetir como en cada elección, aparecen los aparatos de los partidos tradicionales a repartir cosas pero es evidente que un sector mayor de la población saca la conclusión que no se trata de lo que te den para las elecciones porque el resto del año está viviendo mal. Hay descontento, desilución y decepción con todos los gobiernos que han pasado". 

Comparó la situación actual con las elecciones legislativas del 2021: "Recorriendo casa por casa, esa es nuestra clave frente a tanta publicidad en redes y tanto cartel. Salir con nuestras propuestas casa por casa. Así compensamos la falta de publicidad. Tenemos que organizar a los trabajadores y eso no se hace con una publicidad en las redes, por eso nos interesa salir a hablar con la gente, cara a cara. En las legislativas había un enojo general, lo recibíamos. En esta elección hay desorientación e incógnita más que rechazo".

"Hemos crecido porque nos metimos en los barrios a organizar y generar asambleas. Hoy más de la mitad de los trabajadores están fuera de un convenio colectivo de trabajo, es decir estan en negro, precarizados, contratados, cooperativas, programas sociales. Nos hemos dado la tarea a fondo de organizar a esos trabajadores con el Polo Obrero y el Teresa Vive, eso nos permite un crecimiento político, porque surgen discusiones de los problemas generales del país. Esto no va para ningún lado y todos los principales candidatos proponen un rumbo que va a empobrecer más a los trabajadores. Ese laburo en los barrios ha permitido nuestro crecimiento", aseguró. 

La izquierda logró presentar en 6 ciudades candidatos en todas las categorías, una de las cuales es La Histórica. Lo hizo a través de una alianza nacional -y su réplica local- entre el MST-Nueva Izquierda y el Partido Obrero, quienes llevan como precandidatos en la fórmula presidencial a Gabriel Solano y Vilma Ripoll. Enfrente tendrán a Myriam Bregman y Nicolás del Caño, del PTS, que no tienen armado en la provincia de Entre Ríos. 

Respecto a la bronca de la gente, Amarillo rechazó que hasta el momento eso sea canalizado por la extrema derecha: "Nosotros nos estamos jugando a fondo para canalizar la bronca de la gente. La extrema derecha no es que lo ha logrado capitalizar tampoco, si vemos las elecciones provinciales el descontento se muestra más en el ausentismo, el voto en blanco o nulo".

Respecto a propuestas concretas de cara a la ciudad, Amarillo aseveró: "Queremos terminar con el negociado de las licitaciones de obra pública. Acá las obras las realizaba el Municipio con herramientas, empleados y todo bajo la órbita estatal. Eso lo han dejado abandonado porque evidentemente a los intendentes les ha resultado hacer mejor negocio con las empresas constructoras y un montón de recursos se van a la mano de tres o cuatro empresarios amigos del gobierno que ganan siempre. Hay que volver al viejo esquema porque bajarían los costos de cada obra. Acá teníamos una planta asfáltica y se dejó abandonado".

"Hay que terminar con el robo de los impuestos sobre el servicio de tarifa eléctrica. Te atan al consumo de luz, un supuesto costo de alumbrado público, no me pueden cobrar un impuesto atado al consumo y la electricidad es un derecho y servicios. Queremos terminar con los impuestos, el gobierno reconoce que las empresas no lo pagan", amplió.

Y para finalizar, habló del déficit habitacional y las dificultades que tienen los trabajadores para comprar un terreno y su casa propia: "Queremos lotear todos los valdíos y terrenos fiscales. Acá cuatro desarrolladoras inmobiliarias se la pasan construyendo pero el que labura no puede acceder a la tierra".