Cuatro personas, dos de ellas de nacionalidad italiana, fueron detenidas en Corrientes por personal de Gendarmería Nacional acusadas de integrar una organización dedicada al tráfico de bebés. Las primeras detenciones se concretaron el domingo durante un procedimiento realizado en base a pistas, según las cuales los falsos padres, tras cerrar el trato con los vendedores, intentaron viajar con el niño de cuatro días de vida en un automóvil particular. La pareja de italianos fue detenida sobre la ruta nacional 12 cuando se dirigía desde la localidad de San Cosme hacia la provincia de Buenos Aires. La madre es una joven perteneciente a una familia rural de condición humilde y también quedó detenida, mientras el recién nacido fue derivado al hogar de niños Tía Amanda.

Fuentes de la investigación confirmaron que la pareja de padres falsos había radicado domicilio provisional en la localidad bonaerense de Castelar, pero tenía la intención de llevar al niño a Italia. Si bien no se dio a conocer a qué región de la península pertenecen, fuentes judiciales dijeron que ambos son italianos de nacimiento y que viajaron especialmente al país para llevarse al bebé.

Además, manifestaron que entre los detenidos se encuentra el encargado de buscar niños de corta edad para colocarlos en el circuito de venta de personas y ubicarlos en el seno de familias radicadas en otros puntos del país o el exterior.

El hombre aparentemente operaba en la zona rural del departamento San Cosme. Desde allí, según las fuentes, hizo contacto con la pareja que llegó desde Castelar interesada en simular el nacimiento de un niño tras pactar una cifra por la compra del bebé con su madre biológica, quien también fue aprehendida por los gendarmes.

Las primeras detenciones se concretaron el domingo durante un procedimiento realizado por efectivos del escuadrón 48, en base a pistas según las cuales los falsos padres, tras cerrar trato con los vendedores, intentaron viajar con el niño en un automóvil particular, según informó el sitio digital minutouno.

La pareja fue detenida sobre la ruta nacional 12 cuando se dirigía desde la localidad de San Cosme hacia la provincia de Buenos Aires en un Ford Escort que fue secuestrado. En el vehículo fue hallado el niño de cuatro días, en buenas condiciones generales, aunque por razones preventivas fue sometido a un chequeo médico.

Los investigadores comprobaron que el bebé había sido separado de su madre a las pocas horas de nacer, por lo que se extremaron los cuidados en su alimentación durante las primeras horas.

La madre es una joven perteneciente a una familia rural de condición humilde. El cuadro es repetido en Corrientes, donde la religiosa Marta Pelloni lleva a cabo una cruzada contra el tráfico de menores y llegó a organizar marchas del silencio por la aparición del pequeño Miguel Ángel Bejarano, desaparecido en Esquina y cuyo destino sigue siendo incierto.