La Policía y la Municipalidad intervinieron en una casa, donde se denunció que había una “fiesta electrónica”, pero se trataba de una docena de jóvenes que tenían una reunión social, que no está habilitada, en esta etapa de la cuarentena.

Personal policial de la Comisaria Catorce de la capital entrerriana y personal Municipal de Habilitaciones, llegaron anoche hasta una vivienda de la zona de calles Echeverría y Gobernador Crespo, donde se había denunciado que se llevaba a cabo una “fiesta electrónica”, ya que se escuchaba música a alto volumen y se indicaba que, en el lugar, había más de 30 personas.

Según fuentes policiales citadas por el portal El Once TV, cuando llegaron al lugar, a alrededor de las 22 de anoche, “se constató que, en el interior de la quinta, había cuatro autos estacionados y un total de trece jóvenes, quienes manifestaron que solo estaban comiendo choripanes”. También se pudo confirmar “que la música estaba alto volumen”, indicaron desde la Departamental Paraná.

Cabe destacar que dos de los jóvenes reunidos regresaron de la Provincia de Buenos Aires en los últimos días, incumpliendo el aislamiento obligatorio correspondiente, por tratarse de una zona de circulación del coronavirus.

Así lo confirmó el comisario Raúl Menescardi, jefe Departamental de la Policía de Paraná. “Había dos personas que, si bien eran de Entre Ríos, habían venido de otra provincia”, dijo el funcionario policial y agregó que “se les hizo las actas y se los notificó. El personal de la Municipalidad, también le dio intervención al sector de Salud”, señaló.

A raíz de la reunión no habilitada, el personal policial notificó a las personas presentes “del acta por incumplimiento al Decreto de Necesidad y Urgencia 297/20, ante la falta que cometieron. Mientras que los agentes municipales labraron acta sobre la violación al decreto municipal”.

Posteriormente, los jóvenes que realizaron una “choripaneada” en plena cuarentena, se retiraron del lugar.