“Que haya liderazgos que aún no se han impuesto en la sociedad es una cosa, pero hay liderazgos fuertes dentro de la oposición que se van a ir consolidando. Faltan seis meses. Va a ser un proceso en el que va a haber muchos acuerdos, de hecho hay acuerdos preexistentes”. Así respondió Strassera a la interpelación sobre la dispersión de la oposición y la falta de líderes fuertes y cautivantes para dar pelea al oficialismo kirchnerista en las elecciones de octubre, en todos los niveles de gobierno.

Benedetti se manifestó en el mismo sentido e hizo ver que “la gente generalmente no visualiza a los candidatos hasta que aparecen consagrados con una elección”. “Los argentinos tenemos todavía una lamentable tendencia a idolatrar caudillos. Lo cierto es que hasta que el candidato no resulta electo, se considera que no tiene condiciones para gobernar”, dijo y ejemplificó sobremanera: “Pasó con (Carlos) Menem, con (Néstor) Kirchner que llegó a la Presidencia con apenas el 22 por ciento de los votos; con la actual Presidenta, que tampoco tenía un poder importante antes de ser electa”. “Hoy hay un trabajo importante de la oposición tratando de generar un modelo alternativo a este modelo de acumulación de poder económico y político. Todavía la ciudadanía no puede visualizar claramente cuál es el candidato. Me parece que se va a ir decantando poco a poco”, confió.

El debate -en el que hubo más coincidencias que choques-, se dio en vivo en el programa Fuera de Juego (Canal 4 – Gualeguaychú), y allí los legisladores, además, respondieron sobre la fortaleza que pareciera aún poseer Cristina Fernández a diferencia de los ex presidentes que evidenciaban un importante desgaste hacia el fin de sus períodos.

“Las circunstancias del país son mucho mejores que las que se vivieron en la hiperinflación de Alfonsín, cuando se veía el recambio institucional encarnado en Menem. Luego ocurrió ese viento de cambio que venía con (Carlos) Chacho Álvarez, (Graciela) Fernández Meijide, su alianza con (Fernando) De la Rúa. Entonces, puede ser. Pero también es cierto que en todos los procesos democráticos, los intercambios de gobierno no siempre van a tener las mismas características”, analizó Strassera.

Y derivó: “Hoy lo que favorece a la Argentina es una situación económica totalmente diferente, en el contexto de la cual nosotros creemos que hay muchísimas inequidades y por eso es que trabajamos. No puede ser que en este país llegue a haber casi 12 millones de pobres. No es lo que dice o lo que se quiere hacer ver a través de un machaque permanente desde los medios de comunicación en favor de la propaganda del Estado. Esto no es lo mismo que se ve en la calle en absoluto. El otro tema, eso de que a Cristina nadie le puede ganar, yo puedo asegurar que hoy en esta provincia, con lo que fracturó a la sociedad el conflicto chacarero, no veo posibilidad de que la sociedad tenga el convencimiento de apoyar a la Presidenta”.

“Se visten de progres y por otro lado hay una sarta de coimeros adentro del gobierno”, fustigó y les puso nombres: “(Ricardo) Jaime, (Héctor) Capaccioli, (Claudio) Uberti”. “Acá hay alternativas, hay personas que son serias y que han trabajado”, continuó y redondeó: “Lo que pasa es que hay que darles la oportunidad de que se vayan asentando en la sociedad”.

“¿Este es el gobierno progre?”, insistió Strassera. “Dejemos de hacer una apología del gobierno, como que no existe otra posibilidad, que se ve una oposición desperdigada”, se encrespó y subrayó: “La oposición va a tener un proceso de aglutinación y va a tener un candidato que, sin duda, en octubre va a ganar las elecciones”.

Finalmente Benedetti pudo intervenir y expresar su opinión respecto de esta situación y la imagen de debilidad que podría estar transmitiendo el radicalismo, tras las frustradas internas del partido a nivel nacional.

“Hay gente que puede llegar a percibir una imagen de debilidad porque no está acostumbrada a esta forma democrática que tenemos los radicales de resolver nuestras cosas. Pero además creo que lo fortifica y mucho a Alfonsín. La interna no llegó a darse porque (Ernesto) Sanz se bajó de la carrera cuando vio que no había forma de llegar; y (Julio) Cobos, que era otro de los candidatos que podía llegar a competir, comprendió que era mejor apoyar la figura de Alfonsín. Con esto, no hay duda que su figura ha crecido enormemente”, confió el entrerriano.

Y sostuvo: “Los tiempos políticos en Argentina pasan muy rápido políticamente hablando. No hay que olvidarse que antes de que falleciera Néstor Kirchner, estaban debatiéndose a quién ponían de candidato, si iba ella o si iba él. De esto hace apenas seis meses. Perdían o perdían. Esta situación de que a los argentinos nos conmueve la muerte, la catapultó a Cristina; hubo una entereza de ánimo de parte de ella frente a la lamentable pérdida que la posicionó muy bien; pero eso no dura toda la vida”.

Riqueza y distribución

En el marco del debate de oposición, Benedetti incluyó como aspecto a tener en cuenta el escenario de bonanza que atraviesa el país. “La producción agrícola argentina en las épocas de Menem o De la Rúa era la mitad de lo que es ahora, por no decir el 40 por ciento; y hoy vale cinco veces más. Es decir que hoy el Estado tiene diez veces más de fondos por este concepto”, clarificó el diputado y señaló que “esto de alguna manera se distribuye, porque es lógico, no hay otro modo”.

Strassera lo interrumpió para sentar que “se distribuye de una manera que no es la mejor ni la adecuada”. “Cuando uno habla de justa distribución de la riqueza, no quiere decir tener agarrados de los genitales”, acentuó el senador para luego contrastar: “En este país, que ha crecido económicamente y donde la producción es agroalimentaria, que haya gurises con hambre muestra a las claras que algo no está justamente distribuido. Que en este país haya cada vez más gente amontonada, que en el 1 por ciento del territorio nacional viva más del 40 por ciento de la población; muestra que algo está mal hecho”.

“Si nosotros no comenzamos a fijarnos en esas grandes tareas, que son responsabilidades transgeneracionales, vamos a tener grandes problemas en el país”, advirtió el peronista y consignó: “Tenemos que hablar de políticas de Estado a mediano y largo plazo entre las que tiene que estar el problema de la seguridad y la droga; tiene que estar el problema de la inflación, porque cuando sube un punto 100 mil tipos de van abajo de la línea de pobreza”.

“La justa distribución de la riqueza no es la que se mide en números macros. ¿Qué es el Plan Argentina Trabaja? En Concordia hay más de 3 mil planes y ninguno trabaja”, arremetió finalmente Strassera.

En ese punto se hizo espacio Benedetti para cuestionar la instrumentación de la Asignación Universal por Hijo, que salió con apoyo de la oposición en el Congreso, y que venía a paliar la situación de los que realmente menos tienen. “Bien instrumentada, hubiese evitado el clientelismo político que generan los planes sociales”, lanzó y añadió: “Lo cierto es que con la manipulación que se hace de parte del gobierno, no sólo se disfraza la inflación para que la gente crea que sigue ganando lo que gana, sino que también se disimula la tremenda pobreza que hay en Argentina”.

Posicionamientos provinciales

“No voy a hablar por Busti, pero lo he escuchado decir que el mejor candidato post-kirchnerismo es Duhalde. Hay quienes militamos más fuerte a favor de su figura, otros que lo harán de otra manera. De todos modos este es el espacio que vamos consolidando”, se apuró a decir Strassera en un intento por desmentir el alejamiento del líder del PF en Entre Ríos del caudillo bonaerense.

Y en ese sentido argumentó: “Nos equivocamos en querer armar una interna por regiones. Claudicamos porque decíamos que sí a todo para poder seguir construyendo el espacio y fortaleciéndolo. Se llegó al absurdo de pretender que se vote solamente en las capitales. Fue una equivocación, pero esto no quiere decir que uno claudique de los principios que quiere defender y los motivos por los que quiere enfrentar a este gobierno: lo dije bien claro, hay una sarta de coimeros, y no lo digo yo, lo dijo la Justicia”.

Pero además, Strassera no quiso admitir cruces internos al Frente Entrerriano Federal, que el último fin de semana suspendió su congreso en Villaguay. “En todo proceso de construcción hay cortocircuitos”, minimizó.

Bendetti, por su parte, desconfió de las encuestas que no posicionan bien a su hermano Atilio, candidato a la gobernación de Entre Ríos. “Las que tenemos no nos dan tan mal”, aseveró y desvió la atención hacia el escenario nacional. “Vemos sí una fuerte tendencia nacional que va claramente consolidándose a favor de Alfonsín. Hoy se está hablando de algunas alianzas a nivel nacional que demuestra una clara vocación de llegar al gobierno y de gobernar con responsabilidad. En este difícil aprendizaje que hemos tenido los radicales, la figura de Alfonsín me da tranquilidad moral en cuanto a sus intereses, sus intenciones, su transparencia”, se explayó el diputado.

Además, el radical también minimizó los problemas de la oposición y apuntó a los problemas internos del oficialismo. “Urribarri no crece, yo no veo que crezca, no creo que crezca y en todo caso tampoco tiene que ver con ningún error de la oposición”, enfatizó. “Lo que vemos es cada vez un descontento mayor de la sociedad por cómo se priorizan los gastos del Estado o por cómo se hacen de manera poco clara: con obras millonarias que nadie ha pedido como la autopista de Concordia a Paraná; mientras hay gente que padece necesidad, hay problemas en los hospitales, hay inflación”, fustigó el legislador.

“Su figura puede crecer en algunos medios, en la propaganda permanente que hace el gobierno desde los propios medios del Estado, la página web oficial”, fue por más Benedetti y en este punto recordó un pedido de informes que presentó porque el Instituto de Ayuda Financiera a la Acción Social (IAFAS) “destina fortunas a la publicidad”. “En vez de informar a la población qué es lo que se está haciendo, con números, con comparaciones, etc., lo que hacen es un permanente autobombo, y la gente no es tonta”, acentuó.

Y Strassera aprovechó el envión. “Yo lo que digo es que gobernar es fijar prioridades. No voy a decir que no tendríamos que pensar en una autopista entre el Uruguay y el Paraná. Pero vamos a pensarlo cuando tengamos el desarrollo adecuado”, ordenó el concordiense y antepuso: “Antes pensemos en el déficit habitacional que hay en la provincia. Cuando hubo una política de Estado, que fue otorgarle la herramienta al gobierno provincial de tomar un crédito para conformar un fideicomiso para la construcción de 5 mil viviendas para Entre Ríos, nos pusimos de acuerdo y lo votamos”.

“¿Cuántas viviendas se construyeron con ese fideicomiso de 500 millones de pesos? Cero. ¿Cuántas casas se han levantado por la provincia en los últimos tres años y medio? Cero”, se indignó el senador y sacudió: “Debe ser la presidencia del IAPV que ha roto récord de llevar más de mil días sin construir una vivienda. Todas las viviendas que se están realizando en Entre Ríos, para dar un manto de piedad al gobierno, son de la gestión de José Cáceres, hoy ministro de Desarrollo Social”.