Mondino fijó que “antes de deslizar hipótesis sobre el motivo del asesinato primero corresponde que se detengan a los autores, se analicen móviles y causas, y a partir de allí se daría pie a la segunda etapa que es ligarlo o asociarlo a alguna situación”.
“Se está actuando rápidamente, para poder establecer quienes son los responsables, para que a partir de allí se vaya desgajando la situación”, insistió en declaraciones a Radio 10.
Por otra parte, comunicó que se intenta documentar una supuesta prueba sobre algunas declaraciones de Suppo mientras estaba en el Hospital Jaime Ferré, antes del deceso. Allí, la mujer habría mencionado a los profesionales de la salud que la asistían que había sufrido un robo. No obstante, eso no está probado y el único elemento para establecer esa hipótesis es la faltante comprobada de joyas de oro y plata del local, 10.000 pesos en efectivo y efectos personales.
Cabe recordar que Suppo, de 51 años, fue asesinada en su negocio de venta al público, ubicado en el centro de Rafaela. Junto a un grupo de mujeres que padecieron el infortunio del secuestro y la tortura durante la última dictadura militar, aportó al TOF sus propias vivencias en la entonces Guardia de Infantería Reforzada. El paranaense Roberto López Arango presidió el Tribunal, mientras que uno de los fiscales fue José Ignacio Candiotti, del Juzgado Federal de Paraná.
La condena alcanzó a un ex juez Federal Víctor Brusa, al comisario Juan Calixto Perizzoti y otros policías, entre ellos el agente de inteligencia policial Eduardo El Curro Ramos.
(Foto: Uno Santa Fe)