La defensa hizo una crítica al sistema judicial argentino para combatir los delitos de corrupción y analizó el rol del arrepentido. Explicó que la parte acusatoria no se esforzó en acreditar tres hechos significativos en la causa: que Pontaquarto haya sacado los cinco millones de pesos de la Secretaría de Inteligencia del Estado (Side) para pagar las coimas, que haya existido la reunión en Casa Rosada donde De la Rúa habría dicho “eso háblenlo con (Fernando) De Santibáñez” y los entrecruzamientos telefónicos, consignó Infojus Noticias.
El resto de los imputados son De Santibáñez (ex titular de la Side); el ex ministro de Trabajo, Alberto Flamarique; y cuatro ex senadores justicialistas: Alberto Tell, Remo Costanzo, Ricardo Branda y Augusto Alasino.
El juicio comenzó en octubre de 2012 y se prevé que podría extenderse hasta fines de año. El ex presidente suele llegar temprano a las audiencias. Junto con sus abogados escucha atentamente y toma nota de lo que dicen testigos y fiscales. A partir de su caída en Casa de Gobierno en 2001, se dedicó a trabajar en su defensa y limpiar su imagen pública. De hecho, escribió un libro contando su versión de los hechos: Operación política.